29/04/2024
12:41 PM

La prevención, clave para la buena salud

    Mañana 7 de abril se recuerda el Día Mundial de la Salud, que encuentra a la humanidad enfrentando crecientes retos, unos debido a las actividades depredadoras respecto a la madre Tierra.

    El modelo extractivo de los recursos naturales, renovables y no renovables, contamina por igual a la atmósfera, las aguas, los suelos, causante de diversas patologías que, de no ser atendidas oportunamente, conducen a la muerte prematura.

    A ello debe agregarse el cambio climático, que impacta de diversas maneras en las actividades humanas, estilos de vida, enfermedades, evidenciando la vulnerabilidad en que subsistimos.

    La salud es un componente esencial del bienestar, no solo por la ausencia de patologías, igualmente por la posibilidad de disfrutar de alimentos nutritivos y saludables, agua y aire limpio.

    Lo opuesto significa repercusiones directas e indirectas: mayores tasas de mortalidad, deterioro en las condiciones económicas, de por sí precarias para al menos dos terceras partes de nuestros compatriotas, malas condiciones sanitarias, resultando en dengue, diarreas, cólera, infecciones respiratorias, oculares y dermatológicas, al igual que enfermedades de transmisión vectorial, como dengue, chikungunya, malaria, transmitidas por zancudos.

    El aumento en atenciones hospitalarias está directamente relacionado con el deterioro ambiental. Las rápidas alzas en el costo de vida obligan a los sectores medios a ya no poder asistir a centros privados, obligándolos a buscar atención en los estatales, que no siempre están suficientemente abastecidos de medicamentos e instrumentales.

    La contaminación atmosférica, agravada por los incendios forestales, debe resultar en el uso de mascarilla, especialmente por quienes se trasladan de un lugar a otro utilizando el transporte público, al igual que al asistir a espacios bajo techo.

    La limpieza periódica de solares baldíos debe ser obligatoria para sus propietarios, de no hacerlo deben intervenir las corporaciones municipales.

    Resulta alarmante el incremento de pacientes renales y diabéticos, de distintas edades, lo que representa otro desafío y compromiso tanto para los pacientes como para el personal sanitario. Que esta fecha de máxima importancia constituya un punto de referencia para nuestros compatriotas, con énfasis en la oportuna prevención y detección. Recordemos el adagio popular: más vale prevenir que tener que lamentar.