La cápsula Orión de la Nasa volvió con éxito a la Tierra después de una travesía de alrededor de 25 días.
Las fuerzas gravitatorias del interior de la nave no superaron los 4G (a diferencia de los casi 7G de las misiones Apolo).
Esta era la primera vez que la agencia espacial probaba la técnica de “entrada de salto” con una nave espacial de pasajeros, por lo que había muchas incógnitas al respecto.
La cápsula golpeó la atmósfera a Mach 32, o sea 32 veces la velocidad del sonido, y soportó temperaturas de reingreso de 2,760 grados centígrados antes de caer al océano.
Orión amarizó a la hora prevista, después de desplegar en la secuencia planificada un sistema de 11 paracaídas que le permitieron reducir los 523 km/hr de velocidad hasta poco menos de 32 km/hr.
Unos diez minutos después, helicópteros enviados desde el buque de la Marina estadounidense USS Portland sobrevolaron la cápsula y confirmaron a los controladores de la misión el buen estado de la nave.
“Es histórico, iniciamos una nueva etapa en el espacio profundo con una nueva generación de tecnología”, ha declarado el Administrador de la Nasa, Bill Nelson.
La Nasa podría concluir en poco más de 6 meses el primer análisis del conjunto de la información producida por el proyecto Artemis I, que ha concluido un viaje en el que Orión ha recorrido 2.2 millones de kilómetros.
En Honduras, el aumento del presupuesto choca con su baja ejecución, la contratación directa calienta la corrupción, y se habla de nueva tecnología para habitar parte de Ciudad Mateo, construida en 1992.
Mucho tiene que ocurrir antes del regreso de seres humanos a la Luna, por sus conocimientos fuera de este planeta, la Nasa se podría a llevar a los políticos hondureños.
