Haití despedía este sábado al expresidente René Préval, fallecido el 3 de marzo a los 74 años, en un funeral de Estado en Puerto Príncipe que rendirá homenaje al promotor del consenso político en un país tradicionalmente muy inestable.
Familiares y allegados de quien fue jefe del Estado haitiano en 1996-2001 y 2006-2011 se reunieron este sábado junto a los diputados en la plaza del Campo de Marte, en el centro de la capital, en un acto que pone fin a seis días de duelo nacional.
Sentados en pleno sol frente a la tribuna en la que estaba expuesto el féretro de René Préval, los invitados que comenzaron a llegar por la mañana del sábado recibían sombreros de paja típicos del mundo rural en Haití, muy cercano al expresidente fallecido.
Después de la ceremonia religiosa, el actual presidente, Jovenel Moise, pronunciará un discurso, y la hija menor de René Préval, Patricia, también tomará la palabra.
Al día de hoy, Préval es el único dirigente en la historia de Haití que logró terminar sus dos mandatos presidenciales (el límite marcado por la Constitución) sin sufrir un golpe de Estado ni tener que partir al exilio.
La estabilidad que logró ha sido el aspecto más recordado por las personalidades políticas tanto nacionales como internacionales desde el anuncio de su fallecimiento, el viernes de la semana pasada por un accidente cardiovascular.
El expresidente provisorio Jocelerme Privert (2016-2017), quien fue consejero del gabinete de René Préval, insistió en la importancia de mantener el consenso que éste promovió.
Préval ocupó la presidencia de Haití en dos ocasiones: De 1996 al 2001 y de 2006 al 2011.
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Figura imprescindible
Al contrario que el casrismático líder Jean-Bertrand Aristide, Préval, agrónomo de formación, destacó por su gran discreción.
Fue nombrado primer ministro de Aristide cuando éste llegó a la presidencia de Haití, en 1991, y lo sucedió en ese puesto entre 1996 y 2001, antes de asumir su segundo mandato, en 2006.
Préval comenzó a distanciarse de Aristide a inicios de los años 2000, algo que los más fieles partiarios de éste no le perdonaron.
La ausencia de Aristide fue muy notoria el viernes, cuando los haitianos se despidieron de los restos mortales de Préval en los jardines del museo del Panteón Nacional, donde sí acudieron el actual presidente Moise y los principales líderes políticos haitianos.