Las personas que conocieran a un hombre que murió en Castilla y León, España, el pasado noviembre de 2021, cuando tenía 42 años, pueden convertirse en herederos de los 102.448,75 euros (unos 111,000 dólares estadounidenses) que ofrece el casino ‘online’ donde esta persona tenía una cuenta abierta.
Por consejo de sus abogados, que apelan a la Ley de Protección de Datos, este casino no da más detalles de la persona que con su fallecimiento ha dejado esta cantidad de dinero intacta, aunque la pista aportada del mes en el que se produjo la muerte y la temprana edad pueden limitar el número de familias que respondan a este llamamiento de la empresa, según han explicado a EFE fuentes de la compañía Playuzu.
En un comunicado, el casino explica que desde el fallecimiento de esta persona nadie se ha puesto en contacto para reclamar este dinero, para lo que tendrían que aportar la documentación correspondiente a su legitimidad como herederos. Tras una primera búsqueda infructuosa de tres años, los responsables del casino han puesto en marcha esta investigación y lo han puesto en conocimiento de los medios de comunicación para intentar localizar a los familiares o beneficiarios legales del jugador, cuyo saldo sigue intacto en la plataforma desde el momento de su fallecimiento.
Este llamamiento público trata de contactar con las personas que pudieran ser herederas de este hombre pero que quizás desconocieran la existencia de esta cuenta en este casino. Para facilitar el contacto, la empresa ha habilitado un correo electrónico (herencia@playuzu.es), a través del que esperan que personas que tengan algún familiar o conocido que murió a los 42 años en esas fechas de 2021 puedan reclamar esta cuantía.
El director de Operaciones del casino, Jonathan Amselem, ha argumentado en el comunicado que emprenden esta campaña porque se toman “muy en serio la gestión de los fondos” de sus clientes y quieren que este dinero llegue a sus legítimos herederos.
“Hacemos un llamamiento público con la esperanza de localizar a los familiares del jugador y entregarles la cantidad que les corresponde”, ha resumido. En declaraciones a EFE, Amselem ha detallado que tuvieron conocimiento de esta situación porque la normativa que rige para este tipo de negocios implica el cruce de bases de datos oficiales, especialmente para impedir el juego de menores y también para otras acciones de supervisión.
Sobre la frecuencia con la que suelen producirse este tipo de situaciones, el representante del casino, que comenzó a operar en 2020, ha reconocido que no suelen darse mucho, pero ha destacado la importancia de la cuantía y ha defendido la política de transparencia de la compañía.
