Madrid, España.
La Guardia Civil española encontró ayer el cuerpo de la maestra Laura Luelmo, que desapareció hace dos semanas en la ciudad de Huelva, en un caso que ha causado consternación en ese país.
Luelmo se había mudado recientemente a esa ciudad del suroeste de España para realizar una suplencia. La joven había advertido a su novio que se sentía acosada por su vecino, el principal sospechoso de haber cometido el crimen.
La maestra de 26 años desapareció el pasado 12 de diciembre, cuando salió a correr en la comunidad de El Campillo.
Su interpuso la denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional de Zamora el pasado jueves y desde entonces la Guardia Civil coordinó operativos de búsqueda que culminaron con el hallazgo del cuerpo.
Según el reporte de la policía, los restos de la joven fueron encontrados entre unos matorrales de la zona. El cuerpo se encontraba semidesnudo y presentaba golpes en la cabeza y cuello.
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El sospechoso del crimen, Bernardo Montoya, se dio a la fuga. Las autoridades informaron que el hombre acababa de salir de la cárcel en octubre pasado tras cumplir una pena de 17 años por el asesinato de una mujer en la localidad de Cortegana en 1995.
La policía capturó este martes al hermano gemelo de Montoya, quien salió de prisión el pasado fin de semana, para investigar su posible participación en el crimen.
Organizaciones feministas han anunciado protestas tras el asesinato de la joven maestra en todo el país.
