26/04/2024
02:03 PM

Revés para Trump, corte federal ratifica apoyo al Daca

  • 17 mayo 2019 /

Un tribunal con sede en Richmond, Virginia, se pronunció en contra de la decisión del presidente de cerrar el programa que beneficia a los “dreamers”.

    Washington.

    Una corte federal de EEUU respaldó ayer el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia ( Daca), que protege de la deportación a centenares de miles de jóvenes inmigrantes indocumentados, conocidos como “dreamers”, tras una medida similar anunciada en noviembre pasado por otro tribunal.

    La Corte de Apelaciones del Cuarto Circuito, con sede en Richmond (Virginia), se pronunció en contra de la decisión del presidente Donald Trump de acabar en septiembre de 2017 con el programa, cuando aún amparaba a 690,000 personas.

    El tribunal señala que la decisión de la Administración “no fue explicada adecuadamente y, por consiguiente, fue arbitraria y caprichosa”. La corte consideró igualmente la determinación del Ejecutivo “controvertida y polémica”, y puntualizó que disiente de ella.

    Lea: Trump excluye de su plan migratorio a los 'dreamers'

    La instancia judicial se pronunció un día después de que Trump presentara un plan con el que busca aportar más fondos al muro en la frontera con México e imponer barreras de idioma y conocimientos a los inmigrantes legales, para basar su llegada al país más en el “mérito” profesional y menos en sus lazos familiares.

    Para Gustavo Torres, director ejecutivo de la organización proinmigrante Casa, que presentó el caso junto a una coalición de agrupaciones de Maryland, California, Washington, Michigan, Arkansas, Pensilvania, Arizona y Connecticut, entre otras, la decisión “contrasta” con el anuncio de la Administración de Trump. “Este fallo es el resultado de una larga y valiente batalla que nuestros ‘soñadores’ han soportado en su lucha por mantener a sus familias unidas”, señaló Torres, citado en una declaración a medios.

    En noviembre, la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, con sede en San Francisco (California), mantuvo el programa, aprobado por el expresidente Barack Obama en 2012.

    Tras la cancelación ordenada por Trump, un tribunal federal decidió suspender en enero de 2018 la medida a nivel nacional y solicitó al Gobierno que siguiera aceptando solicitudes para inscribirse en el programa hasta que se resolviera el caso.