La pretensión de los pastores evangélicos de participar en política por la vía legal no será posible luego de que el Partido Libertad y Refundación (Libre) adelantara que no prestará sus votos para reformar la Constitución.
“No vamos a apoyar, el Estado es laico, es un legado de la lucha de Morazán y nosotros defendemos ese legado”, afirmó el enlace de la bancada Carlos Zelaya, hermano del coordinador general Manuel Zelaya.
Por su parte, la diputada Patricia Murillo dijo que “no apoyaríamos jamás esa iniciativa, todo lo contrario, luchamos por que se mantenga el laicismo”.
La posición de Libre es clave para los intereses políticos de los pastores, ya que sin los 30 votos de este instituto político no podrán reunir las dos terceras partes (86 votos) que se requieren para reformar la Carta Magna, que prohíbe la participación en política de los líderes religiosos, sean católicos o evangélicos.
El artículo 77 del máximo cuerpo jurídico advierte que “los ministros de las diversas religiones (sacerdotes y pastores) no podrán ejercer cargos públicos ni hacer en ninguna forma propaganda política, invocando motivos de religión o valiéndose, como medio para tal fin, de las creencias religiosas del pueblo”.
