El doctor hondureño Fredal Eduardo Sánchez Martínez (31) acaba de obtener su nuevo título en el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre de la Universidad Autónoma de México.
Fredal Sánchez alcanzó una subespecialidad en Medicina Materno Fetal (Embarazos de alto riesgo).
El hondureño, originario de Intibucá, acaba de ser aceptado para formarse en el Hospital Clínic de Barcelona en Medicina y Cirugía Fetal, siendo uno de los únicos tres aceptados de todo el mundo para formarme en este campo.
“A la vez, soy el primer Centroamericano aceptado para formarme en dicha institución”, comentó.

¿Cómo fue su experiencia?
Una experiencia muy agradable, llena de muchos retos académicos. Pero sobre todo, el hecho de conocer personas procedentes de varios estados de México, así como personas de otros países del mundo, y hacer amistad con todos ellos, fue la parte más agradable de mi experiencia.
¿Qué lo llevó a estudiar su carrera?
Es un hecho que la salud comienza antes del nacimiento. Los días de vida intrauterina (es decir, los nueve meses de embarazo, 40 semanas o casi 280 días) son el momento más importante de nuestra existencia.
Muchas de las enfermedades que acaban con la vida de los niños o adultos (como la obesidad, la diabetes, las cardiopatías (enfermedades de corazón), resistencia a la insulina, entre otras) se originan en este momento de vida intrauterina por ciertas condiciones inadecuadas durante el embarazo.
De tal forma, que si somos capaces de ofrecer un control de embarazo seguro y lo más completo posible, usando los conocimientos y tecnologías más avanzadas, podríamos mejorar la salud de la humanidad desde el inicio de la vida.
¿Qué fue lo más difícil?
Definitivamente, considero que lo más difícil es estar fuera del país y lejos de la familia. Sin embargo, estar lejos, también nos permite forjar nuestro carácter, ampliar nuestras visiones, refinar los objetivos, y mejor aún, darnos cuenta de que nuestro amado país, Honduras, no está “por debajo” de ningún otro país. Somos igualmente capaces que los demás países. Conozco a muchos profesionales de otras áreas de la salud que también han puesto en alto el nombre de Honduras fuera del país.
Un mensaje a los jóvenes de Honduras
Quisiera decirle a los jóvenes de mi país, que no importa el lugar de donde vengan o donde hayan nacido, tampoco los centros de educación donde hayan estudiado (públicos o privados). Si tienen la determinación, la disciplina y el constante esfuerzo, inevitablemente van a terminar alcanzando su objetivo.
El conferencista internacional Yokoi Kenji, en una de sus frases, menciona un aspecto muy importante, y es que: “La disciplina tarde o temprano termina venciendo a la inteligencia”.
Las personas disciplinadas, que son constantes, que perseveran, que nunca pierden de mira su objetivo a pesar de las dificultades, tarde o temprano terminarán alcanzando lo que sueñan.
El éxito no llega inmediatamente, pero la persistencia, la disciplina y la perseverancia terminan por hacer alcanzar los objetivos. Sin embargo, no todo termina allí, puesto que, por otro lado, el escritor James Clear también menciona en uno de sus libros algo muy cierto, y es que debemos saber que la disciplina no basta para alcanzar lo que deseamos... más allá de eso, debemos amar lo que hacemos.
Hay que tener en una misma dirección lo que deseamos hacer con lo que disfrutamos hacer. Esto nos llevará a no cansarnos de luchar por alcanzar lo que deseamos. De tal forma que, sin importar de donde vengamos o quienes seamos, la disciplina que se acompaña del amor a lo que hacemos, terminará inevitablemente encarrilándonos en el camino del éxito.
En mi caso, soy una persona proveniente del interior del país. Nací en el pueblo de Intibucá, mi preparación básica y secundaria las realicé en centros de educación pública, y aun así, nada de esto fue un obstáculo para mi preparación académica. Y hasta el día de hoy, me siento muy orgulloso del lugar de donde vengo, de toda mi familia y en especial de mis padres, el profesor Gabriel Sánchez y la profesora Ondina Martínez, así como de los maestros que formaron parte de mi preparación en los salones de clases en la escuela y el colegio, y del respaldo de Dios en todo momento. Por lo cual, les digo a los jóvenes de mi país, que de esta manera busquen constantemente el éxito, sin olvidar jamás de donde vienen, sin olvidar a su familia y sin perder la humildad.

¿Qué hará en Honduras?
Mi meta es regresar a Honduras y ser parte de las personas que han contribuido al desarrollo de la Ginecología y Obstetricia en el país. El embarazo es probablemente la etapa más importante y anhelada en la vida de la mujer. Ese don único de poder dar vida a otro ser, es el verdadero milagro de la humanidad. Algo tan preciado como esto, merece que seamos capaces de ofrecerle los mejores cuidados y alternativas para dar tranquilidad a la paciente, y asegurar la salud del futuro bebé.
Como lo dije antes, la salud comienza antes del nacimiento. En muchos casos, los fetos (bebés) nacen con alguna enfermedad, como malformaciones estructurales o algunas condiciones que alteran su desarrollo normal. Este tipo de condiciones muchas veces ocasiona la muerte del feto (bebé) u ocasiona la muerte de los recién nacidos, y en aquellos casos que sobreviven, permanecen hospitalizados por mucho tiempo después de nacer.
Cuando un feto (bebé) tiene alguna de estas condiciones, en los países del primer mundo existe la posibilidad de realizar una cirugía fetal intraútero (cirugías realizadas a los bebés antes de nacer) para corregir estas condiciones que de otra manera serían letales o que empeoran la calidad de vida después del nacimiento.
Mi meta es incluir a Honduras dentro de los países en los cuales las cirugías fetales sean una realidad, y de esta manera abrir la puerta de esperanzas y oportunidades para aquellos que aún no nacen.
Recientemente, para esto he competido en el centro de Investigación en Medicina y Cirugía Fetal más importante del mundo, en el Hospital Clínic de Barcelona. Y he sido uno de los únicos tres aceptados de todo el mundo para formarme en este campo.
A la vez, soy el primer Centroamericano aceptado para formarme en dicha institución. Por lo cual, me siento muy animado al saber que Centroamérica y en específico nuestro país Honduras, podrá ser incluido en el grupo de países que tendrán alianza con esta importante institución, y que de esta manera podremos ofrecer a nuestras pacientes embarazadas lo que solo se realiza en países del primer mundo, un control prenatal de alta calidad.
En los casos en los cuales los fetos tienen alguna condición que ponga en riesgo su vida, abriremos la puerta de esperanzas y oportunidades para aquellos que aún no nacen y necesitan una cirugía fetal intrauterina para poder sobrevivir o mejorar su pronóstico.
