San Pedro Sula, Honduras.
Después de permanecer 48 horas paralizadas las unidades de transporte de las empresas Impala y Caribe, por estar cansados de tanta extorsión, este viernes decidieron nuevamente ofrecer sus servicios.
Un grupo de transportistas manifestó ayer que la acción de paralizar las unidades fue porque delincuentes le subieron al 'impuesto de guerra', es decir, al cobro de la extorsión.
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Estas empresas cubren la ruta Puerto Cortés - San Pedro Sula. Hacia la Gran Terminal Metropolitana donde permanecen sus unidades, han llegado este viernes un buen número de miembros de la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP) para realizar operativos y mantener la tranquilidad entre los conductores.
Miles de personas en Honduras han muerto en la última década producto de las materializadas amenazas de pandilleros o de miembros del crimen organizado en Honduras.
