Los nuevos trastornos alimenticios que matan, esté alerta con sus hijos

Uno de cada 10 hondureños sufre algún tipo de trastorno alimenticio. Esté atento y conozca las señales en sus hijos

San Pedro Sula, Honduras.

¿Había escuchado sobre la vigorexia, alcohorexia, ortorexia o la tanorexia? Así se llaman los nuevos trastornos que pueden estar poniendo en riesgo la vida de sus hijos.

El culto al cuerpo que casi se vuelve una epidemia , los cánones de belleza impuestos por la publicidad y el ser aceptado por la sociedad están provocando el “boom” de estas enfermedades, que cada vez están apoderándose de la juventud. Se estima que uno de cada 10 hondureños sufre algún tipo de trastorno alimenticio.

Este sábado 30 de noviembre se conmemora la lucha contra estas enfermedades. “Se tiene la creencia de que la delgadez es sinónimo de belleza. Los cánones de belleza impuestos en los medios de comunicación y los efectos adversos están dañando no solo el cuerpo de las personas, sino la mente”, dice Danori Carbajal, nutricionista sampedrana.



Expresa que muchos de estos trastornos pueden derivar, por ejemplo, del bullying, ya que desde la casa o escuela comienzan a decirle “ qué gordo estás”, eso puede generar desórdenes fatales y trastornos de alimentación caracterizados por presentar alteraciones graves en la conducta alimentaria.

A thin young woman sitting on a scale in her bathroom

Las persons que lo sufren se obsesionan con el peso.


Según la OMS, el 35% de las causas de morbilidad mundial inician en la adolescencia, por eso tratarlas a esas edad podría tener un impacto positivo para cuando sean adultos.
Cómo detectarla. Si usted es padre de familia, sobre todo de adolescentes, préstele atención a estas señales.

Las personas con trastorno alimenticio pueden experimentar cambio de peso corporal, preocupación excesiva por el peso, conteo exagerado de las calorías, desmayos, vértigos, pérdida de conocimiento, hacen ejercicio de manera excesiva y se deprimen.

Estos trastornos tienen consecuencias como la menorrea (ausencia de la menstruación) alopecia (caída de cabello), pérdida de masa ósea, masa muscular, anemia o pérdida de electrolitos, que son fatales y llevan a la muerte a la persona que los sufren.

Nuevos trastornos alimenticios



Alcohorexia: es una enfermedad que reemplaza las calorías de la comida por alcohol. Son personas que no quieren aumentar de peso, pero no quieren dejar de beber, entonces sacrifican la alimentación.

Vigorexia: un trastorno mental en el que la persona se obsesiona por su estado físico a niveles patológicos que repercuten en lo nutricional. Este tipo de personas son adictas al ejercicio, sumado a un ingesta exagerada de proteínas, asteroides, hormonas de crecimiento y anabólicos, entre otros.

Ortorexia: trastorno del comportamiento alimenticio que consiste en la obsesión por consumir alimentos sanos al grado de seguir reglas muy estrictas sobre los alimentos a consumir (abusan de los integrales, quitan grasa buena a la alimentación, viajan o llevan a reuniones su propia comida).

1

Permarexia

Foto: La Prensa

Trastorno de la alimentación relativamente moderno donde la persona piensa que todo lo que come engorda y eso le lleva a probar diferentes dietas, muchas de ellas poco saludables, las llamadas “dietas milagro”.
Hay expertos que consideran que es el paso previo a la anorexia o a la bulimia.
Si se han hecho más de tres dietas al año para bajar de peso la situación es preocupante.
Contar calorías constantemente o mirar las etiquetas nutricionales de forma obsesiva son algunos de los síntomas.
Consumo constante de suplementos polivitamínicos, diuréticos o alimentos dietéticos, como productos milagro.
Fluctúan de peso constantemente. Aparecen las “dietas yoyo” en las que el individuo gana al final más peso del que pierde, lo que se llama efecto rebote.
A diferencia de la ortorexia (obsesión por la comida sana), estas personas se obcecan por el contenido calórico sin importarles las características nutricionales de los alimentos.
Se trata de un trastorno típicamente femenino presionado por los cánones de belleza actuales dominados por la figura esbelta.

2

Seudorexia o Pica

Deseo irresistible de comer o lamer sustancias no nutritivas como tiza, yeso, bicarbonato, algodón, pegamento, moho, ceniza de cigarrillo…
Según el tipo de sustancia que se ingiera se le da nombre al trastorno siendo la geofagia o consumo de tierra el más estudiado.
Una de las formas de tratamiento es a base de suplementos nutricionales combinado con apoyo psicológico y fármacos.

3

Bulimarexia

Foto: La Prensa

Es un proceso que alterna situaciones de hiperactividad y negaciones a comer típicas de la anorexia, con atracones y purgas clásicas de la bulimina.
Las mujeres jóvenes suelen ser las más afectadas.
Sequedad en la piel, trastornos hormonales y cardiopatías son los problemas que aparecen en los primeros estadios de esta conducta.
La presión social, las modas y la personalidad del individuo son los factores desencadenantes.
El profesor Villarino cita el caso de la emperatriz Sissi que, a raíz del deterioro de su cuerpo, no permitió que hubiera ningún cuadro suyo desde los 30 años, y murió con más de 50.

4

Potomanía

Foto: La Prensa

Deseo frecuente de beber gran cantidad de líquido de forma compulsiva y sensación de placer. También denominada polidipsia psicológica.
Superar los 4 litros diarios puede llevar a una hiperhidrosis grave en especial si se hace en un corto periodo.
A veces se asocia a la anorexia ya que beben agua para tener sensación de saciedad.
Tratamiento: diuréticos para controlar la posible hipoglucemia y limitar la infesta a 1,5 litros/día.

5

Drunkorexia-Ebriorexia

Las trastornos alimentarios pueden afectar más a las adolescentes.
Tendencia entre algunas adolescentes. Restringen su ingesta alimenticia para compensar el consumo de calorías que les proporcionan las bebidas alcohólicas cuando salen “de marcha”.
Suelen estar muy informadas de la cantidad de calorías de los alimentos y de las bebidas, pero no conocen la proporción y equilibrio de los nutrientes.
Para evitar que el alcohol haga estragos tienden a comer dulces, snacks energéticos (como patatas fritas)…Una alimentación nada cardiosaludable.

6

Diabulimina

Trastorno de la conducta que se gesta en personas recién diagnosticadas de diabetes tipo 1 y que requieren tratamiento crónico con insulina.
La pérdida de peso como consecuencia del desequilibrio hormonal antes del diagnóstico y la recuperación posterior del peso gracias a la dieta y a la insulina puede llevar a algunas personas a rebajarla dosis de insulina para bajar kilos.
Con los niveles de glucosa elevados en sangre, la aparición de una cetoacidosis diabética es muy probable y hay riesgo de un coma, además de problemas neuropáticos, afectación en ojos, fallos renales…
No aparecen vómitos ni atracones como en la bulimia.

7

Sadorexia

Procede de la anorexia, bulimia y ortorexia combinado con un maltrato corporal y empleo de métodos de adelgazamiento masoquistas.
También se conoce a este trastorno como “dieta del dolor”.
Se emplea para llegar a una delgadez extrema con consecuencias catastróficas.
Perfil: personas con baja autoestima, deprimidas, que buscan la perfección y desean alcanzar lo imposible, lo que les puede llevar a la muerte.

8

Síndrome del comedor nocturno

Foto: La Prensa

Se caracteriza por la ingesta por la noche de más del 25% del total de calorías que hay que tomar a diario, falta de sueño y anorexia matutina, poca o nula ingesta de alimentos en el desayuno.
A la anorexia matutina le acompaña una hiperfagia (comer en exceso) en la tarde-noche con ingesta de más del 50% del total calórico después de la cena.
Además provoca despertarse varias veces, ansiedad y tensión a la hora de ir a dormir.
No conlleva los efectos de la bulimia (vómitos, laxantes, diuréticos) o del trastorno por atracón (las tomas son pequeñas cantidades).
Se da un personas con baja autoestima y depresión y se puede considerar también un trastorno del sueño, además de ir unido al síndrome de piernas inquietas, apnea y sonambulismo, además de acarrear un aumento de peso.
Tratamiento: psicológico y dietético con control de alimentos y horarios.