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La embarazada corre el riesgo de sufrir anorexia nerviosa

La dieta debe ser baja en azúcares y grasas, por eso se debe limitar el consumo de alimentos procesados.

México

Seguir una dieta severa durante el embarazo por miedo a perder la figura tras el parto es una riesgosa práctica cada vez más frecuente.

Puede provocar partos prematuros, bebé con bajo peso al nacer e incluso abortos, advierte Josefina Lira, especialista del Instituto Nacional de Perinatología (INPer).

En casos así, el bebé se queda más tiempo en terapia intensiva, tiene más problemas de infecciones, no come bien, presenta alteraciones metabólicas y todo esto pone en peligro su vida, advierte.

“Además, la restricción en el crecimiento intrauterino provoca que durante el trabajo de parto el bebé incluso pueda fallecer. Son pequeñitos muy propensos a sufrir hipoxia, a tener sufrimiento fetal”, detalla.

Precaución

La baja ganancia de peso en el embarazo también es frecuente en adolescentes que no planearon su embarazo, pero en estos casos suele ser debido a la ansiedad.

La anorexia nerviosa durante el embarazo también se le conoce como pregorexia y de forma popular se le llama “mamirexia”.

La ganancia normal de peso durante el embarazo varía dependiendo del índice de masa corporal de la mujer, aclara Otilia Perichart, nutrióloga clínica e investigadora del INPer.

La especialista, refiere que durante el embarazo la dieta debe cambiar porque las necesidades de energía aumentan, en el segundo trimestre la mujer debe ingerir 340 kilocalorías y durante el tercer trimestre 452 kilocalorías más al día.

Consejos

1. Consumir grasas vegetales como el aguacate, semillas y aceites con moderación.

2. Aumentar el consumo de frutas y verduras, cereales de granos enteros e incluir leguminosas en la alimentación diaria.

3. Durante el embarazo se recomienda realizar 30 minutos de actividad física moderada cinco días a la semana.