REDACCIÓN. Los últimos meses del año se caracterizan por ser lo más fríos en Honduras y, a su vez, por ser los más propicios para contraer virus respiratorios.
Esto se debe a que las bajas temperaturas condicionan una menor ventilación en las viviendas, los lugares de trabajo, centros escolares y demás sitios de cerrados donde se reúnen varias personas.
La doctora en medicina general, Luz Aguilar, indica que las medidas de higiene y distanciamiento son básicas para evitar el contagio de las enfermedades que más se desatan en esta temporada, tales como:
RESFRIADO
El resfriado es la enfermedad más común del invierno y no significa nada grave u hospitalización. Los síntomas pueden ser congestión o escurrimiento nasal, tos, estornudos, lagrimeo, en algunos casos puede presentar fiebre y dolor de garganta.
“No obstante, estas molestias no duran más de cinco días y se curan de forma sencilla con descanso y medicamentos de venta libre como Sudagrip o Panadol antigripal”, dice la experta.
GRIPE
La gripe es una enfermedad infecciosa aguda producida por un virus, “con la gripe se debe tener un poquito más de cuidado porque se transmite rápidamente de persona a persona a través de las gotitas de saliva, y si se descuida puede dañar los pulmones y bronquios.
Se parece mucho a un resfriado, pero los síntomas se presentan con más intensidad y un malestar general que afecta la productividad”, explica.
COVID-19
Como se ha registrado en las últimas semanas, el virus del covid-19 está alcanzando un nuevo brote.
Esto significa que hay que reforzar las medidas de bioseguridad para evitar un contagio masivo como el que surgió en 2020 y 2021, sobre todo, las personas que padecen enfermedades de base como la hipertensión o diabetes.
Esta enfermedad y la gripe suelen ser similares, pero un síntoma que ayuda a diferenciarlas es la pérdida de olfato o gusto.
“Los médicos queremos concienciar a la población de que tras las últimas actividades sociales multitudinarias y con las próximas fiestas navideñas, es inevitable un repunte de casos de coronavirus, por eso insistimos en la aplicación de las dosis de vacunas que les haga falta y seguir usando la mascarilla en espacios cerrados”, señala Aguilar.
BRONQUITIS
Esta afección consiste en la inflamación de la pared de los bronquios por los que circula el aire para llegar a la parte más profunda del pulmón.
Entre los síntomas se encuentra la tos persistente, fiebre, cansancio, dolor de pecho y dificultad respiratoria.
que generalmente causa la bronquitis aguda es un virus, aunque también existe la posibilidad de ser causado por bacterias.
Lo que sí se debe saber es que los antibióticos no son una correcta opción para contrarrestarla.
NEUMONÍA
La neumonía ocurre cuando un germen infeccioso invade el tejido pulmonar.Su causa suele ser la aspiración de microorganismos desde las vías respiratorias más altas.
El organismo puede resultar más vulnerable a esta enfermedad por factores como el consumo de tabaco, las enfermedades pulmonares crónicas, el alcoholismo, la desnutrición, etc.
Los síntomas de esta enfermedad pueden ser fiebre, escalofríos, tos con flemas, dolor de pecho al estornudar o toser, falta de apetito y debilidad para respirar.
“Para detectarse, el paciente debe someterse a una radiografía de tórax y en los casos graves pude requerir hospitalización”, dice la doctora.
PREVENCIÓN
El riesgo de contraer todas las enfermedades antes mencionadas puede reducirse con una serie de hábitos como: lavarse las manos con agua y jabón la mayor cantidad de veces posibles al día, si no hay agua y jabón disponibles, use un desinfectante de manos a base de alcohol.
Además, es importante no tocarse los ojos, la nariz o la boca si no se ha lavado las manos. Por otro lado, debe mantenerse alejado de las personas que estén enfermas, usar mascarillas, no tocar las superficies públicas, no compartir trastes, no saludar de beso, y abrigarse muy bien mientras haya alerta de frío en el país.
SÉPALO
La mayoría de los casos de resfriado común mejoran sin tratamiento en pocos días, pero en el caso de las demás enfermedades puede que no sea así.
Por lo tanto, lo mejor que puede hacer es cuidarse mientras su cuerpo se recupera.
La ingesta de líquidos ayudará a no deshidratarse (agua, limonadas, té de manzanilla, de canela y jengibre), asimismo, el uso de enjuagues nasales salinos y el dormir lo más que pueda, le ayudará a aliviar los síntomas.
