San Pedro Sula, Honduras
La crisis política que se vive en Brasil con la separación del cargo de la presidente Dilma Rousseff, no tendrá impacto en el comercio bilateral de Honduras con la primera economía de América Latina, prevén analistas.
La balanza comercial entre los dos países es netamente favorable a los sudamericanos. Lidabel Almendárez, gerente de política comercial del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) explica que en el período 2013-2016, Honduras importó bienes procedentes de Brasil por valor de $365.8 millones, mientras que en el mismo período, Honduras exportó hacia ese mercado apenas $2.1 millones.
Honduras importa de Brasil maquinaria agrícola y de construcción, cerámica, derivados del petróleo, papel, cartón, vehículos, medicamentos y algunos productos agrícolas, en tanto que los exportadores hondureños envían al mercado brasileño aluminio, textiles, productos de cartón, semillas y colorantes sintéticos, de acuerdo con los datos que maneja el Cohep.
Según el informe de Comercio Exterior de Mercancías Generales, publicado por el Banco Central de Honduras (BCH), hasta febrero de este año, las exportaciones a Brasil representaban el 0.2% del total de las exportaciones hondureñas, mientras que las importaciones de origen brasileño representan el 1.5% del total de los bienes que Honduras compra del exterior, registrando un leve incremento de 0.1% en comparación con 2015.
Almendárez agrega que “el comercio fluye indistintamente de la relación las políticas que manejen los países y al final lo que prima es el intercambio de las partes”, por lo que una posible destitución de Dilma Rousseff tendría un efecto mínimo en la relación comercial de Honduras con Brasil.
