La actriz tuvo problemas graves con el exceso de sustancias tras su éxito en la colaboración con "el rey del pop" en los años 80. Y ahora cuenta sus vivencias desde otra perspectiva.
Monáe irrumpió en el escenario vestida como Michael Jackson para interpretar ‘Don’t Stop Till You Get Enough’. Asimismo, Stevie Wonder salió para interpretar la icónica canción ‘We Are The World’.