Una exquisita mano de piedra, vegetales frescos, limón y hierbas se fusionan en un platillo que provoca un gran placer en la boca. Esta preparación debe consumirse fría y la carne tiene que estar muy tierna para un mejor gusto.
Este platillo es sin duda uno de los grandes referentes en la gastronomía de la costa hondureña. Es de sabor exótico por la mezcla de carnes y la leche de coco.
Este es uno de los cortes más deseados por su sabor insuperable y sofisticado, con un color rojo carmesí y un marmoleado perfecto; disfrútalo con estos complementos 0 seconds of 58 secondsVolume 90%