Ganado ahogado y zonas incomunicadas: los estragos de la tormenta Sara en Atlántida

Ríos desbordados, cultivos arrasados y puentes destruidos ocasionó la tormenta Sara en el departamento de Atlántida. El sector ganadero fue uno de los más afectados al perder cientos de reses producto del desastre. A continuación más detalles.

El puente Saopín, en La Ceiba, crucial para conectar la carretera CA-13 con el puerto de cabotaje, colapsó debido a la fuerza del río Cangrejal.

La caída del puente afecta al sector ganadero, ya que dificulta el traslado de la leche, que se echa a perder si no se transporta rápidamente.

En otras zonas la leche se transforma en lácteos como queso y mantequilla, pero la falta de energía también les ha ocasionado pérdidas.

Las calles de Atlántida se inundaron tras el paso de la tormenta Sara. Este fue uno de los departamentos más afectados.

Hay familias ganaderas que han perdido hasta 250 cabezas de ganado. “No sé cómo vamos a salir de esta”, dijeron ganaderos a LA PRENSA Premium.

Campos usados para alimentar al ganado quedaron bajo agua, dificultando aún más la recuperación de los productores en Atlántida.

A pesar de que varios lugares siguen inundados, los trabajadores siguen ordeñando sus reses y buscando la forma de transportar la leche.

Productores ganaderos temen por la salud del ganado sobreviviente, especialmente las reses de alta calidad genética que requieren cuidados especializados.

Miembros de la comunidad trabajan en conjunto para salvar ganado atrapado en el lodo.

La tormenta arrasó con varios animales en la zona, generando importantes pérdidas económicas para los ganaderos.

Los ganaderos piden al gobierno el acceso urgente a préstamos que les permitan recuperarse del fuerte golpe económico causado por la tormenta.

Calles y caminos en el sector rural de Atlántida quedaron intransitables, dificultando el transporte de productos agrícolas y ganaderos.

Así como Atlántida, los departamentos más afectados fueron Choluteca, Valle, Colón y Yoro.

Más de 2,000 personas a nivel nacional permanecen en refugios temporales, tras perder sus hogares y pertenencias por la tormenta Sara.