08/05/2024
07:58 AM

Con música lleva esperanza a cientos de niños sampedranos

En Expocentro atienden de 7:00 am a 7:00 pm; en el Colegio de Ingenieros, las 24 horas.

San Pedro Sula, Honduras.

En los últimos cinco años, la sampedrana Marcela Carolina Fernández García, máster en Ejecución Musical por la Universidad de Miami, ha llevado educación musical gratuita a cientos de niños de escasos recursos de San Pedro Sula.

Para lograr este objetivo y bajo el lema Cambiando vidas una nota a la vez, la joven de 33 años fundó en San Pedro Sula el proyecto Uremu, el cual arrancó con 42 estudiantes del centro de educación básica Primero de Febrero del sector Satélite.

La oenegé Uremu tiene presencia en cinco centros educativos en Chamelecón, Felipe Zelaya, Cabañas, Satélite y recientemente en Choloma.

Foto: La Prensa

Marcela es muy apreciada y respetada por los niños que instruye en Uremu.
En medio de la pandemia, las clases de Uremu se han impartido en línea para que los estudiantes no pierdan su progreso y se relajen en el autoaislamiento.

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Antes de la pandemia, luego de recibir sus clases en los centros educativos, los menores de 7 a 17 años recibían su formación como músicos de lunes a viernes de 2:00 pm a 5:00 pm y los sábados de 2:00 pm a 4:00 pm, horas clase que ahora se imparten de forma digital.

Cada uno de estos estudiantes recibirá cinco años en un primer ciclo de educación formal como músico. Uremu actualmente está trabajando en abrir un segundo ciclo para que los jóvenes reciban otros cinco años de formación y puedan ser maestros de música y también integrarse para crear una orquesta juvenil. El certificado de formación de Uremu, emitido tras finalizar los cinco años, junto al título de bachiller, les es suficiente a estos jóvenes para poder optar a estudiar un pregrado en música en cualquier parte del mundo si así lo quisieran, relató la máster Fernández.

“Nuestro enfoque son los niños, les inculcamos que pueden llegar a ser mejores seres humanos para su comunidad”.

El año pasado, los niños de Uremu viajaron a tocar en una gira en México y Corea del Sur, una experiencia que llenó de esperanza a estos pequeños.

“En los próximos 10 años, Uremu espera poder llegar a más instituciones en San Pedro Sula y viajar por el mundo con los niños”, finalizó.