San Pedro Sula, Honduras.
Esmeralda Rivas (77 años), residente de la colonia Fesitranh, recuerda aún que hace poco más de 20 años viajar en un taxi colectivo le costaba tres lempiras; claro, relativo al costo de la vida en aquellos tiempos.
Actualmente paga 15 lempiras, un precio considerable de acuerdo a su criterio, sin embargo, considera que aumentar la tarifa sería afectar la economía de quienes diariamente utilizan el servicio, ya que debe tomarse en cuenta que en su mayoría son personas con salarios que apenas les alcanzan para pagar las necesidades básicas.
Gladys Montiel, quien para ir a su trabajo usa los colectivos que cubren la ruta de la colonia Ebenezer, sector Chamelecón, al centro de la ciudad, dijo que antes de darse un incremento en el pasaje deben mejorar las condiciones de las unidades.
“Ni aire acondicionado le ponen a la gente y uno tal vez llega ahogado del gran sol. Uno entiende que ellos también necesitan para llevar comida a sus casas, pero que se toquen el corazón, porque al menos yo me negaría a pagar más, mejor ando en bus”, refirió la sampedrana. Hay quienes denuncian que aunque no hay un aumento autorizado, hay colectivos que cobran más en horas de la noche.
También está una reducida parte de la población que señala que aunque se haga un aumento en las tarifas del colectivo no les importaría pagarlo porque se sienten un poco más seguros viajando en estas unidades de transporte.
Análisis
Argumentando constantes alzas en los refinados del petróleo y encarecimiento en los repuestos para los vehículos, dirigentes del gremio de colectivos se reunirán mañana en Tegucigalpa solicitando a las autoridades analizar un incremento de cinco lempiras a la tarifa actual.
Los conductores indican que desde 2011 hacen un cobro de 15 lempiras, un precio irrisorio y desfasado, pues ellos gastan al día entre L700 y L800 en combustibles.
Elio Muñoz, presidente de la Asociación de Taxistas de Honduras (Ataxis) en San Pedro Sula, dijo que todos los líderes del sector a nivel nacional viajarán a Tegucigalpa a reunirse con los dos comisionados del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT) para tratar este y otros problemas que tienen, como la clonación de números y taxis fantasmas.
Muñoz comentó que debe tomarse en cuenta que al menos el 80% de los motoristas que prestan el servicio pagan una tarifa diaria por no tener unidades propias. En la Capital Industrial circulan unos 2,500 taxis colectivos, los cuales diariamente movilizan al menos 50,000 usuarios, representando para el sector un ingreso económico de 750,000 lempiras al día.
Determinación
René Caballero, delegado regional de la zona noroccidental del IHTT, manifestó que en base a lo que dice la Ley de Transporte Terrestre, en cuanto a la revisión de tarifas los comisionados determinarán si es favorable un incremento. Expuso que tienen denuncias, que ya investigan, de empresas que arbitrariamente han hecho aumentos.
Nelson Toro, dirigente, desestimó que las rutas urbanas puedan tener subida.
Esmeralda Rivas (77 años), residente de la colonia Fesitranh, recuerda aún que hace poco más de 20 años viajar en un taxi colectivo le costaba tres lempiras; claro, relativo al costo de la vida en aquellos tiempos.
Actualmente paga 15 lempiras, un precio considerable de acuerdo a su criterio, sin embargo, considera que aumentar la tarifa sería afectar la economía de quienes diariamente utilizan el servicio, ya que debe tomarse en cuenta que en su mayoría son personas con salarios que apenas les alcanzan para pagar las necesidades básicas.
Gladys Montiel, quien para ir a su trabajo usa los colectivos que cubren la ruta de la colonia Ebenezer, sector Chamelecón, al centro de la ciudad, dijo que antes de darse un incremento en el pasaje deben mejorar las condiciones de las unidades.
“Ni aire acondicionado le ponen a la gente y uno tal vez llega ahogado del gran sol. Uno entiende que ellos también necesitan para llevar comida a sus casas, pero que se toquen el corazón, porque al menos yo me negaría a pagar más, mejor ando en bus”, refirió la sampedrana. Hay quienes denuncian que aunque no hay un aumento autorizado, hay colectivos que cobran más en horas de la noche.
También está una reducida parte de la población que señala que aunque se haga un aumento en las tarifas del colectivo no les importaría pagarlo porque se sienten un poco más seguros viajando en estas unidades de transporte.
Análisis
Argumentando constantes alzas en los refinados del petróleo y encarecimiento en los repuestos para los vehículos, dirigentes del gremio de colectivos se reunirán mañana en Tegucigalpa solicitando a las autoridades analizar un incremento de cinco lempiras a la tarifa actual.
Los conductores indican que desde 2011 hacen un cobro de 15 lempiras, un precio irrisorio y desfasado, pues ellos gastan al día entre L700 y L800 en combustibles.
Elio Muñoz, presidente de la Asociación de Taxistas de Honduras (Ataxis) en San Pedro Sula, dijo que todos los líderes del sector a nivel nacional viajarán a Tegucigalpa a reunirse con los dos comisionados del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT) para tratar este y otros problemas que tienen, como la clonación de números y taxis fantasmas.
Muñoz comentó que debe tomarse en cuenta que al menos el 80% de los motoristas que prestan el servicio pagan una tarifa diaria por no tener unidades propias. En la Capital Industrial circulan unos 2,500 taxis colectivos, los cuales diariamente movilizan al menos 50,000 usuarios, representando para el sector un ingreso económico de 750,000 lempiras al día.
Determinación
René Caballero, delegado regional de la zona noroccidental del IHTT, manifestó que en base a lo que dice la Ley de Transporte Terrestre, en cuanto a la revisión de tarifas los comisionados determinarán si es favorable un incremento. Expuso que tienen denuncias, que ya investigan, de empresas que arbitrariamente han hecho aumentos.
Nelson Toro, dirigente, desestimó que las rutas urbanas puedan tener subida.
