El empresario José Miguel Handal Larach (74), pidió ayer públicamente a las autoridades de Honduras que lo dejen volver a su vivienda.
“Tengo nueve meses de estar en esta clínica privada. Quiero que las autoridades me dejen volver a mi casa. Enfrento la justicia, no pretendo huir porque soy inocente”, dijo Handal.
El jueves anterior, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos comunicó al empresario que ya no está incluido en la lista de la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Ley Kingpin), pero el empresario sigue teniendo un juicio pendiente por lavado de activos ante las autoridades hondureñas.
“Mi juicio inició el lunes pasado, pero se suspendió y se determinó que volveré a juicio hasta enero del próximo año, pero no entiendo, ¿por qué a mí no me dan arresto domiciliario?”, indicó.
Handal aseguró que no le han permitido salir de la clínica privada en San Pedro Sula, adonde se encuentra custodiado por militares, ni para seguir el tratamiento de sus ojos, por lo que ha perdido 50% de su visión, afirmó.
