Estados Unidos
Los antialérgicos de venta libre podrían empeorar los síntomas del síndrome de piernas inquietas, afirma un neurólogo.
Las personas con el síndrome experimentan sensaciones incómodas y un impulso potente de mover las piernas, que pueden resultar dolorosos y perturbar el sueño, según el doctor William Ondo, director de la Clínica de Trastornos del Movimiento del Hospital Metodista de Houston.
Casi 12 millones de personas de Estados Unidos tienen el síndrome de las piernas inquietas, según la Asociación Americana del Sueño (American Sleep Association).
'Los pacientes con síndrome de las piernas inquietas ya tienen dificultades para dormir, porque sus síntomas tienden a empeorar de noche o con el descanso, pero los antihistamínicos sedantes pueden intensificar los síntomas', apuntó Ondo en un comunicado de prensa del hospital.
Muchas personas toman antihistamínicos para tratar los estornudos, el escurrimiento nasal y otros síntomas de las alergias estacionales.
'Aun no comprendemos por qué los antihistamínicos sedantes empeoran el síndrome de las piernas inquietas, pero sí sabemos que los antihistamínicos no sedantes no afectan tanto a los síntomas porque no entran al cerebro con tanta facilidad', dijo.
'Es muy frustrante para mis pacientes cuando una pastilla para dormir, como un antihistamínico sedante, no les ayuda a dormir, así que les aconsejo buscar otras opciones para aliviar las alergias, como los aerosoles y los descongestionantes nasales', añadió.
Algunas personas que creen que son alérgicas a los antihistamínicos sedantes porque los fármacos les hacen sentirse hiperactivas podrían tener el síndrome de las piernas inquietas sin diagnosticar, y deben consultar al médico, aconsejó Ondo.
Los antialérgicos de venta libre podrían empeorar los síntomas del síndrome de piernas inquietas, afirma un neurólogo.
Las personas con el síndrome experimentan sensaciones incómodas y un impulso potente de mover las piernas, que pueden resultar dolorosos y perturbar el sueño, según el doctor William Ondo, director de la Clínica de Trastornos del Movimiento del Hospital Metodista de Houston.
Casi 12 millones de personas de Estados Unidos tienen el síndrome de las piernas inquietas, según la Asociación Americana del Sueño (American Sleep Association).
'Los pacientes con síndrome de las piernas inquietas ya tienen dificultades para dormir, porque sus síntomas tienden a empeorar de noche o con el descanso, pero los antihistamínicos sedantes pueden intensificar los síntomas', apuntó Ondo en un comunicado de prensa del hospital.
Muchas personas toman antihistamínicos para tratar los estornudos, el escurrimiento nasal y otros síntomas de las alergias estacionales.
'Aun no comprendemos por qué los antihistamínicos sedantes empeoran el síndrome de las piernas inquietas, pero sí sabemos que los antihistamínicos no sedantes no afectan tanto a los síntomas porque no entran al cerebro con tanta facilidad', dijo.
'Es muy frustrante para mis pacientes cuando una pastilla para dormir, como un antihistamínico sedante, no les ayuda a dormir, así que les aconsejo buscar otras opciones para aliviar las alergias, como los aerosoles y los descongestionantes nasales', añadió.
Algunas personas que creen que son alérgicas a los antihistamínicos sedantes porque los fármacos les hacen sentirse hiperactivas podrían tener el síndrome de las piernas inquietas sin diagnosticar, y deben consultar al médico, aconsejó Ondo.