Estimulación eléctrica no reemplaza el ejercicio

La estimulación eléctrica es practicada por deportistas, pero funciona mejor cuando se combina con otros ejercicios.

  • 20 sep 2012

¿Y si hubiese una forma de conseguir los mismos efectos de musculación en el cuerpo en 20 minutos, sentado en el sofá, que con ejercicios convencionales durante unos 90 minutos? Al parecer, la hay.

Este método milagro se llama Electroestimulación Muscular y la usan atletas profesionales como por ejemplo el campeón de los pesos pesados de boxeo Vitali Klitchko. Los estudios realizados por la Escuela Superior de Deporte de Colonia, en Alemania, confirman que funciona.

“La electroestimulación es el término para la activación artificial de los músculos con corriente eléctrica de baja frecuencia”, explica Veit Wank, profesor de la Universidad de Tubingia y miembro de la Asociación Alemana de Ciencias Deportivas.

Los electrodos que emiten impulsos eléctricos se colocan sobre la piel cerca de los músculos para estimularlos. Los impulsos activan la fibra muscular, lo que hace que aquellos se contraigan “sin involucrar al cerebro, que normalmente es el que da la orden a los músculos de contraerse o relajarse”, indica Wank.

Las opciones de entrenamiento van desde las más pasivas en las que la persona solamente se coloca en diferentes posturas mientras recibe las descargas, a otras más intensas combinadas con pesas o sobre una cinta de correr. El tipo de entrenamiento depende del nivel atlético de la persona y sus preferencias, señala Johannes Pommerien, experto en el tema.

La electroestimulación ejercita el cuerpo sin movimiento por la intensa contracción muscular que produce”, indica Pommerien. En otras palabras, quien quiera músculos para practicar deportes que involucran mucha fuerza, tiene que practicar deportes que involucren fuerza.

La estimulación eléctrica puede traer beneficios si se usa como programa suplementario, pero es de mucha importancia practicar otro tipo de ejercicios, comenta Juan Carlos Kattán, entrenador personal de Fitness & Health. Si se realiza de manera adecuada, la estimulación eléctrica no es peligrosa, pero deben evitarla las mujeres embarazadas y las personas con un marcapasos o con erupciones cutáneas.