Guía Médica
¿Sabía que permitir que los niños sean inactivos físicamente es tan peligroso para su salud como dejarlos que fumen o consuman alcohol? Pueden llegar a sufrir de sobrepeso u obesidad.
Según la organización Mundial de la Salud, OMS, el sedentarismo es uno de los cuatro factores de mayor riesgo de muerte y estima que en el mundo 3.2 millones de defunciones anuales pueden atribuirse a esto.
Así de riesgoso considera Deborah Salvo, especialista en actividad física y salud del Instituto Nacional de Salud Pública de México.
“La inactividad física es un problema de salud pública no solo por su asociación con la obesidad. También está ligada directamente a padecimientos como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, ciertos tipos de cáncer y osteoporosis”, comenta.
Las consecuencias del sedentarismo y la mala alimentación han provocado que en el mundo los menores tengan sobrepeso u obesidad.
Ana Bertha Pérez, especialista en nutrición y actividad física de la Universidad Iberoamericana, agrega que para lograr que los niños sean activos, lo más importante es que los invite a actividades divertidas.
“Tienen que hacerlo de una manera lúdica, juguetona, alegre y como todo lo que hacen los niños, el modelo es muy importante. No le puedo pedir a mi hijo que juegue, brinque, se levante, si yo como mamá o papá no soy un modelo”, dice.
Si la actividad se realiza entre dos o más personas y al aire libre, suele ser más atractiva y durar más.
Sin movimiento
Ser sedentario significa permanecer mucho tiempo sentado, acostado o inmóvil, pero sin estar dormido, explica Deborah Salvo, y eso es lo primero que hay que evitar.
Es necesario fomentar en toda la familia un estilo de vida activo, pero especialmente en los niños, porque es justo en esa edad cuando se adquieren los hábitos.
Una regla en casa para evitar que los niños pasen horas y horas sin moverse es limitar las horas-pantalla, coinciden las especialistas.
El tiempo que los niños pasan frente a la tele o la computadora (cuando no están haciendo tarea) y cualquier dispositivo electrónico no debe ser más de una hora diaria.
Un consejo de la experta Deborah Salvo es destinar una habitación en la que el niño sea libre de jugar y correr.
Los niños durante el ejercicio deben consumir alimentos ricos en calcio como la leche, yogur y queso.
Cinco consejos
1. Tiempo: Para mantenerse sanos y tener un desarrollo adecuado, los niños deben realizar 60 minutos de actividad física continua al menos cuatro días a la semana, de acuerdo con la Academia Americana de Pediatría.
2. Actividades: Andar en bici o patines, hacer caminatas a buen paso. Mientras lanzan una pelota, jugar con un hula hula, brincar la cuerda y recuperar los juegos tradicionales son algunas opciones.
3. Tecnología: Puede practicar o jugar algunos videojuegos que requieran moverse. Para que el niño se mantenga activo, mientras está en casa.
4. En casa Los niños pueden ayudar en las quehaceres del hogar, asigne a sus hijos una tarea doméstica como barrer o trapear el piso. Puede hacerlo una vez al día.
5. Mente: El ejercicio suscita un estado de ánimo positivo, disminuye los niveles de estrés, y promueve un mayor nivel de socialización. Y se evita sufrir de estrés.
Adiós a un mal hábito
Aunque resulte tentador decirle a su hijo que si cumple con la tarea lo llevará a su restaurante favorito o permitirle comer frente al televisor, esto puede aumentar su peso corporal, los expertos advierten que esta práctica puede tener consecuencias negativas a largo plazo.
Los infantes deben evitar comer frente a la televisión, ya que ingerirán más comida.
“Si usted le da comida como premio a su hijo, lo estimula a comer más rápido para disfrutar su recompensa, y deja de lado el hecho de que debe alimentarse porque su cuerpo requiere nutrientes, lo que inhibe el disfrute de los alimentos y distrae al niño en cuanto a la importancia de masticar despacio y aprovechar bien los alimentos”, asegura Ana Cristina Gutiérrez, nutricionista.