¿Quién era Kilver Pérez, el hondureño que murió aplastado en México? ICE lo deportó
Kilver Pérez fue detenido por ICE camino a la escuela. Intentó reunirse con su familia en Tampa, pero murió en un accidente en México. Era de Tegucigalpa
- Actualizado: 10 de noviembre de 2025 a las 13:57 -
La historia de Kilver Pérez ha conmovido las redes sociales. Fue deportado a Honduras y en su intento por regresar con su familia, murió aplastado en un accidente vial en México.
Kilver era un hondureño originario de Tegucigalpa, la capital del país. Tenía 36 años y era padre de tres varoncitos, los cuales eran el motor de su vida.
La pesadilla de este hondureño comenzó un día que parecía rutinario. Cuando iba a dejar a sus hijos a la escuela fue detenido por ICE y luego lo deportaron.
Se instaló en Tegucigalpa y días después pasaría algo que lo desesperaría. Sus hijos lo visitaron en Honduras y cuando ellos se fueron comenzó a decirle a los suyos que iría "mojado" porque no resistía estar lejos de su esposa e hijos.
¿Qué pasó? La idea de regresarse a Estados Unidos la cumplió, sin embargo, murió en su intento.
El 4 de noviembre, Kilver murió junto con otros migrantes que se transportaban en este trailer.
Kilver y otros tres migrantes murieron aplastados por el pesado automotor.
Así quedó el tráiler en que viajaba Kilver. El accidente se registró en la carretera Jiménez–Torreón en México.
"Mis ojos y mi corazón lloran, pero mi alma confía en el Señor. Durante casi 22 años no pude verlo, pero nuestro amor y nuestra comunicación siempre estuvieron vivos, porque el cariño verdadero no conoce distancia", escribió su hermana Sarahy.
"Te amaré toda mi vida, hermano. Gracias por existir, por amarme desde la distancia y por dejar huellas que el tiempo nunca podrá borrar", agregó Sarahy.
Saray y Kilver estuvieron muchos años sin verse. "Hace poco tuve la dicha de volver a verlo en persona, y ese momento quedará grabado en mi alma para siempre. Jamás olvidaré el instante en que lo abracé; ojalá aquel abrazo hubiera durado un poco más, pero ahora entiendo que fue un regalo del cielo antes de su partida", contó.
Además, le agradeció por sus tres hijos. "Gracias por habernos dejado esos hermosos regalos, mis sobrinos. Poder conocerlos fue hermoso. Gracias por todo. Te amaré siempre", cerró.
Kilver había subido en sus redes sociales, fotos de la visita de sus hijos. "Los llevó a Roatán, los paseó por todo Honduras", contó una amiga.
Esta fotografía tomada en las eólicas de Santa Ana, Kilver había confesado lo duro que era separarse de sus hijos.