27/04/2024
10:38 PM

Se agrava crisis energética en Panamá

A pesar de las medidas de austeridad, las autoridades no descartan un racionamiento a partir del fin de semana

La crisis energética que vive Panamá tendía a agravarse este jueves ante la persistencia de una severa sequía, mientras que las medidas de ahorro tomadas por el gobierno han resultado insuficientes y podrían comenzar los apagones controlados.

'Me gustaría equivocarme, pero yo creo que si no cae una gota (de lluvia) no llegamos a mañana (viernes)' sin tener que hacer cortes programados de electricidad, aseguró al canal Telemetro el secretario general de Energía, Vicente Prescott, quien precisó que los apagones serían de un mínimo de dos horas.

La ausencia de lluvias ha provocado que los embalses de Bayano y Fortuna, los principales del país, estén bajo mínimos y a las hidroeléctricas no llegue el agua suficiente para generar la energía necesaria que atienda la demanda diaria en el país.

La crisis ha llegado incluso al Canal de Panamá, que adoptó medidas respecto del uso del agua en sus operaciones, como pasar dos barcos a la vez por las esclusas (cada vez que una embarcación pasa por las esclusas se vierten millones de metros cúbicos) o la suspensión de la asistencia hidráulica a los buques para desplazarlos con mayor rapidez.

Aunque la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) asegura que 'no hay restricción en el tránsito de buques' hasta el momento, se realiza un seguimiento de la situación meteorológica 'para poder tomar las medidas correspondientes de manera oportuna', según un comunicado.

Medidas insuficientes

Para ahorrar energía, el gobierno ordenó el martes el cierre por tres días de las escuelas, se recortó el horario laboral de los funcionarios y se ha prohibido encender letreros luminosos en horas nocturnas.

La economía de servicios en este país con más de un 10% de crecimiento económico -el mayor de América Latina- también podría afectarse gravemente.

El gobierno también ordenó el cierre de los bares, cines, casinos, restaurantes, discotecas y otros centros de diversión a partir de las 10 de la noche de lunes a jueves, en un país donde el turismo es una de sus tres principales fuentes de ingresos.

'A pesar de las medidas tomadas, que han dado resultados muy buenos, no cae una sola gota de agua en los embalses', según Prescott.

Muchos comercios optaron por adquirir sus propias plantas eléctricas, mientras que otros cerraron por la noche o ignoraron las medidas.

Organismos como las agencias de la ONU limitaron el uso de los ascensores y otras instituciones o empresas privadas han limitado el uso de los aires acondicionados, en un país con una alta humedad donde esos aparatos son muy populares.

El presidente panameño, Ricardo Martinelli, reiteró hoy el llamado a seguir las medidas de ahorro energético 'para no llegar a medidas más drásticas', y criticó que algunos empresarios han visto las disposiciones 'como un relajo' porque no las han cumplido en sus negocios.

'No hay visos que vaya a llover', lamentó Martinelli en TVN.

Sequía histórica

La sequía, la peor en quince años según algunos expertos, afecta también al campo, donde ya han muerto más de 200 reses y las pérdidas son superiores a los 200.000 dólares, por lo que el gobierno declaró el estado de emergencia en cuatro provincias del país.

Según las autoridades, con las medidas el consumo eléctrico se habría reducido 15%, pero se necesita ahorrar mucho más.

'Eso es muy positivo, además los embalses están recibiendo pequeños aumentos (...) aunque la situación sigue siendo crítica y seguimos estando en alerta', dijo Berta Burgos, vocera de la Secretaría de Energía.

La demanda de electricidad en Panamá alcanza los 1,400 megawatts al día, en un país cuya producción de energía procede en un 28% de hidroeléctricas, un 31% de búnker, 23% de diésel, 10% de carbón, 4% de autogeneración y un 2% de importación.

El mayor consumidor es el sector comercial (46%), seguido de los hogares (36%) y el sector gubernamental (12%).