La Ceiba, Honduras.
El técnico Ramón Maradiaga estuvo este viernes supervisando los entrenamientos del Vida y confiesa que le gustaría marcharse del equipo con un triunfo ante la Real Sociedad. Los cocoteros reciben a los aceiteros este sábado a partir de las 7:00 pm en el inicio de la segunda vuelta del Torneo Apertura de la Liga Nacional de Honduras.
'Miro a los muchachos bien, están entusiasmados, ahora sólo estamos esperando que la respuesta sea buena ante Real Sociedad. Me gustaría marcharme a El Salvador con un gane, la verdad eso sería lo ideal, buscar cerrar con una victoria, vamos a buscarla porque el equipo tiene argumentos para podarla alcanzar', explicó.
'Tengo un compromiso con los jugadores, con la gente que me ha asistido y con el presidente Roberto Dip, con eso cumplo mi promesa de estar hasta el último momento, el sábado decidiré si voy a estar en el banquillo o afuera. Quiero que la transcisión no sea abrupta para alcanzar el objetivo que queremos', reiteró.
Maradiaga renunció de su cargo como timonel cocotero para dirigir la selección de El Salvador que busca su primer clasificación a una justa mundialista en Rusia 2018.
'Llegué al Vida a establecer mi línea de trabajo a algunos quizás no le habrá gustado que optaron por retirarse, pero lo que a mi me interesa era desarrollar mi cargo, que los jugadores se sientieran satisfechos y respaldados, todavía quedaron muchas cosas por hacer en la parte logística, pero la verdad me voy satisfecho'
Maradiaga explicó. 'Me voy un poco desilusionado con alguna gente del Vida que espero no volverme a encontrar, pero esto pasa en todos lados no sólo acá, me voy tranquilo y sin guardar rencor, simplemente me doy cuenta de lo que existe en las instituciones, esto sólo me hace ser concistente en mis ideas'.
'Me sentí bien en La Ceiba, la ciudad me agrada, me satisface la gente, me voy contento porque La Ceiba me pone retos importantes, de esta ciudad salí a dirigir a Guatemala cuando estaba con Victoria y ahora voy a El Salvador cuando estaba con Vida', concluyó.
