La estructura, ubicada a una profundidad de entre cinco y tres metros y de unas dimensiones de 300 metros de largo y 150 de ancho, ha sido localizada gracias a unos trabajos de teledetección realizados por Ricardo Belizón Aragón y Antonio Sáez Romero, de la Universidad de Sevilla , que ahora deberán ser investigados con prospecciones reales para confirmar su hipótesis de que se trata de los restos del famoso templo.