En opinión de su hija, Mayra Henríquez, quien reside en México, “hablar de Lucy Ondina es hablar de la pasión, de la emoción, de la entrega al arte, a la sensibilidad y al amor que provoca en todas las manifestaciones de los géneros artísticos”.
El teatro llevó a Lucy Ondina por todo Centroamérica, además de presentarse en México en recitales en el Palacio de Bellas Artes, en el Salón Hispanoamericano de la Secretaría de Educación Pública, el Centro de Actualización del Magisterio, el Colegio Nacional de Educación Profesional y una dependencia de la Universidad Nacional Autónoma de México .