El dictador Daniel Ortega de Nicaragua tiene la mala costumbre de robarse cosas. Actualmente vive en una casa que se robó en 1979, al final de la revolución sandinista. Y ahora se quiere robar al país que
El Paso, Texas. Las cámaras y las luces estaban listas. Nos encontrábamos a punto de iniciar el noticiero de televisión cuando, de pronto, a mis espaldas, dos inmigrantes se saltaron el muro metálico
Es curioso cómo los líderes y políticos que alaban y premian a las dictaduras no viven en ellas, no fueron detenidos y torturados en sus cárceles, y pueden entrar y salir sin problema de sus países. Ese es el
Ninguno de los dos, ni Joe Biden ni Donald Trump. La mayoría de los estadounidenses quiere un cambio generacional en la Casa Blanca. Eso es lo que dicen las encuestas. El problema es que ni demócratas
Las democracias mueren por dentro. Casi siempre. No se defendieron lo suficiente o se les permitió a elementos extremistas violar la ley y crecer sin castigo.
Lo mejor de Estados Unidos son sus oportunidades y libertades. Lo peor es que un pistolero te puede matar a ti y a tu familia en un cine, en un supermercado, en un salón de baile o en una escuela.
La desinformación en la internet está tan extendida que hay teorías conspirativas tan absurdas como, por ejemplo, la que asegura que los pájaros no existen. Por eso hay que estar muy alerta.
Los corresponsales extranjeros de Estados Unidos y Canadá, que no están acostumbrados a los largos monólogos del presidente de México, tuvieron una probadita de lo que son las “Mañaneras”, esas
El 2 de enero de 1983 aterricé en la ciudad de Los Ángeles. No tenía vuelo de regreso. Mi idea era quedarme uno o dos años en Estados Unidos y luego regresar a México.