El cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez, pidió este Domingo de Resurrección hacer el bien, desterrar la cultura de la muerte, el egoísmo y la envidia, y luchar por “una mejor Honduras”.
“Hay un vicio horrible que se llama la codicia, que es una sed insaciable de acumular y tener cosas y, peor todavía, de tener dinero”, reflexionó el religioso hondureño.
El cardenal de Honduras, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, felicitó este domingo a la Corte Suprema de Justicia de Panamá por su reciente fallo relacionado con el matrimonio igualitario, con el cual, dijo, ha “blindado” a este país de “esos errores” de las “ideologías de hoy en día”.
También sigue en aumento la cantidad de hondureños que a diario se van de su país, entre 500 y 600 diarios, según organismos humanitarios, por la falta de empleo, o de un salario digno para salir de la pobreza extrema en que viven.
Rodríguez instó a los hondureños a pedir a la virgen de Suyapa que “no sigan más los feminicidios, sino más bien el respeto de unos por otros y el respeto de la madre, la hermana, la esposa, la hija, esa es una enseñanza de la virgen María”.
Cuatro sacerdotes católicos nicaragüenses fueron declarados el día 26 culpables de los delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas en perjuicio del Estado de Nicaragua y la sociedad, informó la Unidad de Defensa Jurídica.
Ha desempeñado los siguientes cargos: Párroco de San Vicente de Paúl en San Pedro Sula y Vicario Episcopal de la Mosquitia en la Diócesis de Trujillo; desde 2016, Párroco de San Vicente de Paúl en San Pedro Sula y Superior Regional de la Congregación de la Misión en Honduras.
En su intervención, el líder católico mencionó que “ser cristiano es descubrir con gozo que Dios está con nosotros, su amor y su ternura nos envuelven, si Dios está con nosotros no hay nada que temer, nuestra vida está garantizada”.