Redación
Microsoft atendió las peticiones de los usuarios y dio marcha atrás con la actualización automática de Windows 10.
A partir de ahora, antes de proceder a la instalación, el sistema operativo pedirá a autorización del usuario para hacerlo.
Microsoft infirmó que los usuarios tendrán 'una oportunidad adicional para cancelar la actualización o reprogramarla'.
Esta oportunidad consiste en una notificación que confirma el momento de la actualización programada. Si se desea efectuar la actualización, el usuario hace clic en “Aceptar”, y en caso contrario, bastará con que cierre la notificación para cancelar el proceso.
La actualización automática se producía debido a que muchos usuarios mantenían sus computadores configurados para aceptar automáticamente las actualizaciones, pero la actualización de Windows 10 chocaba de frente con las preferencias de buen número de usuarios que preferían mantener la versión que mejor conocían.
Y mientras tanto, esto sucede en momentos en los que se aproxima cada día más la fecha en la que la actualización dejará de ser gratuita, el próximo 29 de julio.
