TEGUCIGALPA.
Un momento de esparcimiento se convirtió en una tragedia para un cobrador de buses en la capital.
Después de una jornada de trabajo, el muchacho operario del transporte urbano se fue a su casa, pero unos minutos después salió.
Eran como las 8:30 pm, contó uno de sus parientes. Miguel Ángel Ortiz Girón (de 30 años) se encontró con dos amigos, un cobrador y otro conductor de bus, en un restaurante de venta de pollos en el que también expenden bebidas alcohólicas en la colonia Loarque.
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Comenzaron a beber y al calor de los tragos, unos minutos pasados de la medianoche del jueves, una violenta riña se desató entre Miguel Ángel y sus dos amigos.
Los dos hombres empezaron a golpearlo hasta verlo inconsciente, tirado en el suelo. El joven murió a causa de politraumatismos en su cabeza, mientras que los agresores huyeron. Miguel Ángel Ortiz residía junto a su familia en la colonia San José de Loarque, colindante con el mercado Perisur.
