Tegucigalpa.
En las últimas horas, el número de personas quemadas por pólvora subió de 17 a 36, según el recuento de los centros hospitalarios del país. Es decir, que el aumento fue de más del 100% de los casos en menos de 24 horas.
La mayoría de las víctimas son menores de edad, por lo tanto sus padres deberán responder ante el Juzgado de Policía de la alcaldía de cada localidad.
En Tegucigalpa, el Juzgado de la alcaldía del Distrito Central ya citó a los primeros padres de las víctimas.
En San Pedro Sula, el vocero del Ministerio Público, Elvis Guzmán, dijo a medios televisivos que investigarán los casos que llegaron al hospital Mario Rivas.
Al principal centro asistencial público de San Pedro Sula llegaron al menos 10 menores afectados por pólvora, de estos cinco quedaron internos.
Las autoridades detallaron que una niña menor de 10 años, procedente de la aldea El Carmen, presentaba solo fracturas expuestas en su mano, está estable. Mientras que de una aldea de El Negrito, Yoro, llegó un menor de cinco años con trauma ocular.
De Choloma y El Progreso llevaron a dos adolescente de 13 años, ambos con quemaduras en sus manos; y el quinto, otro joven de 13 años procedente de la aldea El Paraíso con quemadura por pólvora en sus manos, el paciente está estable.
En la capital
Uno de los casos más graves que ingresó en el Hospital Escuela es el de Sócrates López López (de 26 años) que por manipular una “cebollita” se mutiló dos dedos de la mano derecha.
López es residente del barrio Guanacaste, de Tegucigalpa, y de acuerdo con su relato, él lanzó el cohete, pero al ver que no explotó regresó y lo tomó y al levantarlo le estalló en la mano.
Las autoridades del Hospital Escuela aseguraron que el joven se recupera. Otras cinco personas ingresaron en el Hospital Escuela con quemaduras por manipulación de pólvora; pero fueron dados de alta debido a que sus quemaduras eran leves, informó Miguel Osorio, portavoz del centro asistencial.
Sin ofrecer mayores detalles de la identidad de las personas, Osorio manifestó que se trata de cuatro adultos y un niño que se quemó manipulando una “chispita”.
En Choluteca, Eulogio López (67 años) ingresó de emergencia en el Hospital del Sur debido a que se quemó la pantorrilla izquierda a consecuencia de un mortero que estaba siendo reventado por otra persona, pero con tan mala suerte que le cayó a él. El señor es originario y residente del municipio de Concepción de María, Choluteca.
En la zona oriental del país se reportó el ingreso en la sala de urgencias del hospital Gabriela Alvarado de Danlí, El Paraíso, de Yosel Enrique Hernández (de ocho) con quemaduras de segundo grado en las manos.
De acuerdo con lo relatado por la madre de su madre, este se encontró un mortero y lo encendió, pero no le dio tiempo de soltarlo y le explotó en una mano. Yosel Enrique Hernández es originario de la comunidad La Esperanza, Trojes.
De acuerdo con el reporte médico, este niño ingresó a las 8:00 pm del 24 de diciembre en el centro asistencial de la zona. Su condición es estable.
En el departamento de Santa Bárbara resultó herido por la manipulación de un cohete el joven Denis Sagastume, quien fue trasladado a un centro asistencial por la gravedad de las heridas en la mano derecha.
En el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) de Tegucigalpa no se reportaron ingresos de personas quemadas por pólvora.
Los primeros
Hasta el lunes 24 de diciembre se habían reportado 17 personas, dos son de Copán, quienes de acuerdo con dictámenes médicos se encuentran estables.
Otro caso de quemados tuvo lugar en Siguatepeque, adonde un potente mortero le estalló en la mano a un jovencito de 14 años, lo que le causó causó graves lesiones.
En las últimas horas, el número de personas quemadas por pólvora subió de 17 a 36, según el recuento de los centros hospitalarios del país. Es decir, que el aumento fue de más del 100% de los casos en menos de 24 horas.
La mayoría de las víctimas son menores de edad, por lo tanto sus padres deberán responder ante el Juzgado de Policía de la alcaldía de cada localidad.
En Tegucigalpa, el Juzgado de la alcaldía del Distrito Central ya citó a los primeros padres de las víctimas.
En San Pedro Sula, el vocero del Ministerio Público, Elvis Guzmán, dijo a medios televisivos que investigarán los casos que llegaron al hospital Mario Rivas.
Al principal centro asistencial público de San Pedro Sula llegaron al menos 10 menores afectados por pólvora, de estos cinco quedaron internos.
 En el hospital Gabriela Alvarado, de Danlí, El Paraíso, se recupera de sus graves quemaduras Yosel Hernández.
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De Choloma y El Progreso llevaron a dos adolescente de 13 años, ambos con quemaduras en sus manos; y el quinto, otro joven de 13 años procedente de la aldea El Paraíso con quemadura por pólvora en sus manos, el paciente está estable.
En la capital
Uno de los casos más graves que ingresó en el Hospital Escuela es el de Sócrates López López (de 26 años) que por manipular una “cebollita” se mutiló dos dedos de la mano derecha.
López es residente del barrio Guanacaste, de Tegucigalpa, y de acuerdo con su relato, él lanzó el cohete, pero al ver que no explotó regresó y lo tomó y al levantarlo le estalló en la mano.
Las autoridades del Hospital Escuela aseguraron que el joven se recupera. Otras cinco personas ingresaron en el Hospital Escuela con quemaduras por manipulación de pólvora; pero fueron dados de alta debido a que sus quemaduras eran leves, informó Miguel Osorio, portavoz del centro asistencial.
 Sócrates López perdió dos dedos de la mano derecha en la capital.
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En Choluteca, Eulogio López (67 años) ingresó de emergencia en el Hospital del Sur debido a que se quemó la pantorrilla izquierda a consecuencia de un mortero que estaba siendo reventado por otra persona, pero con tan mala suerte que le cayó a él. El señor es originario y residente del municipio de Concepción de María, Choluteca.
En la zona oriental del país se reportó el ingreso en la sala de urgencias del hospital Gabriela Alvarado de Danlí, El Paraíso, de Yosel Enrique Hernández (de ocho) con quemaduras de segundo grado en las manos.
De acuerdo con lo relatado por la madre de su madre, este se encontró un mortero y lo encendió, pero no le dio tiempo de soltarlo y le explotó en una mano. Yosel Enrique Hernández es originario de la comunidad La Esperanza, Trojes.
De acuerdo con el reporte médico, este niño ingresó a las 8:00 pm del 24 de diciembre en el centro asistencial de la zona. Su condición es estable.
En el departamento de Santa Bárbara resultó herido por la manipulación de un cohete el joven Denis Sagastume, quien fue trasladado a un centro asistencial por la gravedad de las heridas en la mano derecha.
En el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) de Tegucigalpa no se reportaron ingresos de personas quemadas por pólvora.
Los primeros
Hasta el lunes 24 de diciembre se habían reportado 17 personas, dos son de Copán, quienes de acuerdo con dictámenes médicos se encuentran estables.
Otro caso de quemados tuvo lugar en Siguatepeque, adonde un potente mortero le estalló en la mano a un jovencito de 14 años, lo que le causó causó graves lesiones.
