Análisis: San Pedro Sula vivió 108 días sin lluvia en casi cinco meses

Las lluvias ácidas azotan el departamento de Cortés tras una prolongada sequía y temperaturas extremas. Finalmente cayeron este viernes las precipitaciones de invierno

Foto: Foto: Melvin Cubas/La Prensa

Una inesperada lluvia moderada empapó la ciudad industrial durante la tarde del viernes tras varias semanas de sequía.

vie 17 de mayo de 2024

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San Pedro Sula, Honduras.

Después de 108 días sin una gota de lluvia, las primeras gotas de alivio finalmente llegaron este viernes a San Pedro Sula, en el norte de Honduras. La ciudad, que experimentó el impacto devastador del calor extremo y el aire contaminado, también registró una de las las temporadas más secas en su historia.

La Unidad de Datos de LA PRENSA Premium accedió a los registros del Centro Nacional de Estudios Atmosferico Oceanograficos y Sismicos (Cenaos), los cuales muestran que desde el 1 de enero hasta el 15 de mayo de 2024, apenas se han registrado 28 días de lluvias, la mayoría ligera (menos de 5 milímetros).

En otras palabras, durante ese tiempo no llovió en al menos 108 días (cero milímetros), siendo más marcado en abril y mayo, según los reportes analizados.

La última lluvia fuerte (mayor a 25 mm y menos o igual que 50 mm) se registró en enero, mientras que en marzo hubo apenas lluvias moderadas (mayor a 5 mm y menor o igual que 25 mm).

La prolongada sequía que afectó a la zona norte se atribuye al fenómeno de El Niño, una condición climática que provoca escasez de lluvias entre marzo y mayo. De hecho, los registros confirman estos han sido los meses con más condiciones secas.

Desde hace cinco meses, la ausencia de lluvias dejó a la ciudad industrial sumida en un estado de crisis y sequía sin un solo indicio de humedad en el aire. Mayo, tradicionalmente un mes de aguaceros, parecía defraudar las esperanzas de los sampedranos, pero continuó la tendencia.

La tarde del viernes, alrededor de las tres de la tarde, el cielo se oscureció repentinamente y los vientos comenzaron a soplar, anunciando la llegada de una lluvia moderada en varias regiones del departamento de Cortés, producto de una vaguada.

La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias (Copeco) anunció ese día el inicio de la temporada lluviosa y recomendó medidas como limpieza general, dragado de quebradas y recolección de desechos sólidos a los patronatos de colonias, alcaldías y mercados.

Impacto

Expertos consultados indican que este 2024 la sequía estuvo más grave que años anteriores por la acumulación de varios fenómenos al mismo tiempo, como los incendios, quema de cañeras, alto nivel de contaminación en el aire y calor extremo que inciden en el comportamiento de las precipitaciones.

Precisamente el mismo viernes de las lluvias, en horas de medio día, se reportó un incendio en la montaña de El Merendón, en el municipio de Cofradía, Cortés, donde el humo se combinó con el aire contaminado que está esparcido en la atmósfera.

Producto de la sequía, varios ríos y cuerpos de agua que atraviesan la ciudad industrial están casi secos. Las pocas pozas de agua que quedan están siendo evaporadas rápidamente por el intenso sol, dejando ecosistemas en peligro.

Para la bióloga Lessy Palacios la falta de lluvias tiene graves consecuencias para la fauna y la flora, ya que muchos animales y plantas dependen de ciclos específicos de tiempo. La desincronización de estos ciclos puede resultar en plagas y desequilibrios ecológicos.

”Es bastante grave esta situación porque hay un desfase y me refiero a que no nacen algunos animales que tienen que nacer para controlar a otros y otros nacen para hacer estragos a los cultivos. La sequía siempre la hemos tenido, pero ahora vendrá con más frecuencia por la falta de conciencia”, expresó.

La bióloga criticó la falta de medidas implementadas por la población y las autoridades para conservar los ecosistemas, como la reforestación y la protección de cuencas y ríos. “Yo le echo la culpa realmente a las autoridades porque no tienen ninguna campaña de educación de poner la basura en su lugar, de reciclar, ni nada, hay gente que usa una bolsa una sola vez y usted la puede reusar hasta 15 veces, hay poca cultura y eso nos afecta enormemente”, expresó.

" “En San Pedro lo que está matando es esta gran temperatura, ahí está como una olla de presión” "

Acciones

José Madrigal, especialista en gobernanza climática de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), consideró que la crisis que vive San Pedro Sula es preocupante, ya que históricamente la ciudad se ha caracterizado por tener un mayor acceso al recurso hídrico en comparación a otras regiones.

”Como consecuencia de la falta de lluvias sobresale la presencia de las olas de calor que pueden ser perjudiciales para la salud y también en la seguridad alimentaria y nutrición, al existir un impacto en la producción agrícola que depende de las lluvias”, expresó.

Las temperaturas en San Pedro Sula han llegado a los 40 y 41 grados celcius en las últimas semanas, lo que ha impactado en la economía, turismo, demanda de energía y salud pública. A pesar de las primeras lluvias que se registrarán, los expertos dicen que las temperaturas seguirán altas.

Respecto a la energía eléctrica, es otro factor que ha impulsado el calor extremo por la contaminación emitida en su producción asociada a combustibles fósiles. De manera particular, destacan las centrales térmicas.

Madrigal responsabilizó a las autoridades gubernamentales (tanto a nivel central como municipal) de la crisis, pues fue en junio de 2023 cuando el Centro de Predicción Climática de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA por sus siglas en inglés) anunció la llega del fenómeno de El Niño.

”Desde hace años se sabe que Honduras es uno de los países más vulnerables al cambio climático, pero este conocimiento no ha sido acompañado por planes a largo plazo que permitan adaptarse mejor a los impactos adversos. Hemos sido víctimas del vaivén político e ideológico cuando el cambio climático no advierte diferencias de ese tipo”, agregó.

Para el experto, es imperativo que las autoridades municipales de San Pedro Sula implementen medidas de adaptación de manera inmediata y efectiva. Más allá de simplemente construir represas, se debe prestar una atención urgente a la preservación de la Cordillera de El Merendón, un recurso vital en términos de agua.

$!Los incendios forestales han estado a la orden del día en Cortés. Este viernes se incendió la cordillera de El Merendón.

Pronósticos

Las lluvias intensas más cercanas están previstas para finales de mayo, entre los días 20 y 30, según informó José Pavón, pronosticador de turno del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos).

En una conversación con LA PRENSA Premium, Pavón adelantó que, debido a la prolongada ausencia de precipitaciones, estas primeras tormentas de mayo serán de lluvia ácida, que contiene altos niveles de ácido sulfúrico y nítrico.

Estas partículas, contaminadas por la intensa polución atmosférica y el monóxido y dióxido de carbono generados por la quema de bosques, son consideradas peligrosas para la población. Por ello, se recomienda no exponerse a esta lluvia ni recolectarla para su uso.

Los expertos sugieren esperar al menos una semana después de las primeras lluvias antes de utilizarlas para labores agrícolas o para el consumo humano. “Los seres humanos debemos dejar esta lluvia correr, a los árboles es que les cae bien esta agua y es importante que los suelos se impregnen con él y adquieran un poco de humedad relativa”, mencionó Pavón.

Según el mecanismo de medición IQAir, el viernes el nivel de contaminación en San Pedro Sula era de 133, clasificado como “perjudicial para grupos sensibles”. Sin embargo, luego de las primeras lluvias ya el cielo luce despejado del humo.

Se prevé que las lluvias continúen, lo que contribuirá a disipar por completo la densa capa de humo. Mientras tanto, varios departamentos, incluyendo Francisco Morazán, Cortés, Atlántida, Yoro, Comayagua, Colón y Olancho, permanecen en alerta roja debido a la contaminación del aire.

Por otra parte, los departamentos de Copán, Santa Bárbara, Intibucá, Lempira, Ocotepeque, Valle, Choluteca, La Paz y El Paraíso se encuentran en alerta amarilla. Finalmente, Gracias a Dios está en alerta verde.

En junio se esperan precipitaciones más constantes y fuertes, acompañadas de actividad eléctrica a nivel nacional.

" “No hubo una planificación debida, si bien es cierto hay factores que se escapan de nuestras manos, pero hay otros que recaen en la responsabilidad de las autoridades correspondientes” "