La Lima. Aunque ha vivido en las cercanías del río Chamelecón desde hace 18 años, Lourdes Auxiliadora Guerra dice que desde el lunes comenzó a desvelarse vigilando las crecidas, luego de las tormentas que han azotado el valle de Sula y el occidente.

Ella junto a cientos de familias viven en zozobra en la colonia Guaruma 2, donde hay un boquete de unos 300 metros que no ha sido cerrado por un impasse entre los dueños de 13 casas y la alcaldía de Villanueva.

“Nos han prometido que nos reubicarán, (pero) queremos ver las llaves de las casas, para poder movernos, porque no queremos ir a vivir a la calle” indicó Guerra.

Los ríos Chamelecón y Ulúa, según el registro de mediciones del Centro de Desarrollo y Estudios del Valle de Sula, han reportado un aumento en sus caudales que podría representar un peligro para algunas zonas bajas. En el río Chamelecón, en la estación de El Tablón, tuvo ayer por la madruga una crecida de 1.38 metros.

Ese caudal dio un total de 120 metros cúbicos por segundo sumado a los que se generaron por las tormentas de la noche del lunes.

Sin embargo, para los técnicos del Centro de Desarrollo y Estudios del Valle de Sula, esa crecida pasó ayer por la tarde sin dejar inundaciones en zonas vulnerables.

Sobre el río Ulúa han analizado que ha durante el monitoreo de siete días ha tenido picos de crecidas de hasta 1.70, generando 250 metros cúbicos por segundo, por lo que el caudal bajaría por el valle de Sula, afectando zonas bajas de Potrerillos.

Otras áreas perjudicadas serían los cultivos y las siembras en áreas de amortiguamiento.

Las lluvias con menor intensidad serían la única esperanza para que los caudales de los ríos que afectan el valle de Sula comiencen a bajar sus caudales.

LA PRENSA Premium realizó un recorrido por las zonas bajas de Potrerillos, Pimienta, Choloma y La Lima que están cercanas a los ríos donde se pueden observar campos de cultivos inundados.

“En la mañana no estaba así esta crecida y esto nos preocupa, porque vemos que estos bordos no nos van a proteger”, dijo Sonia Cardona, otra vecina de La Lima que desde ayer a las 2:00 pm comenzó a ver la crecida del Chamelecón.

Daños. El inicio de la temporada de lluvias en Honduras ya ha dejado seis personas muertas, entre estas, tres menores de edad que perecieron al caerles muros.

También han causado destrucción de viviendas en San Pedro Sula, Quimistán, Villanueva y Tegucigalpa.

Luego de las tormentas del lunes, murió Ricardo Mejía (75) al quedar soterrado en su vivienda en la comunidad de Peña Blanca de San Antonio, Copán.

En Ocotepeque hace siete días también murió arrastrado por las aguas del río Lempa José Isabel Hernández (78), en un intento de cruzar a caballo.

En Quimistán, Santa Bárbara, el alcalde Darío Pacheco indicó que llevan cuatro días en emergencia por lluvias y piden a la Secretaria de Infraestructura y Transporte (SIT) les envíen maquinaria, pues tienen daños en puentes que han dejado pasos sin accesos.

En San Pedro Sula, Ruth Etelin Gómez Hernández y su hermano perdieron sus casas en la colonia Brisas del Merendón, luego de que las lluvias derribaran un muro y las destruyera.

Unas 10 personas, de dos familias, quedaron en la calle.

Mientras las tormentas dejan daños en diferentes ciudades y comunidades, los vecinos de la colonia Guaruma 2 siguen a la espera de una solución para la reconstrucción del bordo.

San pedro Sula. Francisco Argeñal, director del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), dijo que las tormentas vespertinas que se han registrado en los últimos días en el valle de Sula, el occidente del país y San Pedro Sula continuarán registrándose al final del día porque es cuando se completa el ciclo de convergencia de la humedad del mar.

“Se espera que tormentas similares ocurran nuevamente hoy, aunque estamos viendo que se podría organizar un centro de baja presión por Yucatán. Si eso se forma va a llover en algunos lugares del centro del país después del 3 de junio, de lo contrario, vienen días secos para el norte, el valle de Sula y occidente. Estamos a la espera de ver cómo evoluciona”, explicó.

Respecto a las grandes cantidades de lluvia registradas en San Pedro Sula el lunes 30 de mayo y otros días atrás, Argeñal dijo que para el caso, el lunes se registraron solo 33 milímetros y ello no ameritaba antes emitir una alerta verde.

“Siempre hemos creído que a ciudades como San Pedro Sula 50 milímetros de lluvia no le han hecho nada. Ahora resulta que esta ciudad con 30 milímetros tiene problemas. Son cosas que se escapan al conocimiento de uno. Desconozco las razones por las que se ha incrementado la vulnerabilidad”.

El titular de Cenaos pide a la población mantenerse informada por medios oficiales sobre lo referente al clima, especialmente porque hoy comienza la temporada de huracanes en el océano Atlántico que incluye al mar Caribe y el Golfo de México.