Algunos sitúan el paraíso perfecto en el bosque o las montañas, otros en una playa que los haga olvidar las preocupaciones y, Cayo Caulker, en Belice, bien podría erigirse como la efigie del edén tropical.
Las maravillas debajo del agua templada y nítida del Caribe completan la experiencia, pues confluye una gran variedad de especies marinas. La primera parada se puede hacer en el muelle Tarpon View, adonde se alimenta a los tarpones con sardinas y, después, con ayuda de los guías encontrará caballitos de mar.
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Luego hay que ir mar adentro. Este lugar forma parte de la segunda barrera de coral más extensa del mundo, declarada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, lo que lo convierte en el sitio ideal para admirar de cerca a los animales marinos.
En Cayo Caulker se disfruta de un ambiente relajado, despreocupado, entre sus habitantes cuenta con pescadores artesanales, artistas, extranjeros que decidieron mudarse a un paraíso relajado y una pequeña comunidad de rastafaris.
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Esta hermosa isla se encuentra al lado de Cayo Ambergris y a aproximadamente una milla al oeste del arrecife. Si usted busca un taxi, lo que encontrará son carritos de golf. Varias calles del pequeño pueblo lo conducirán por restaurantes, hoteles, tiendas y casas en muchos colores vivos.
como Patrimonio de la Humanidad, lo que lo convierte en el sitio ideal para admirar de cerca a los animales marinos. |
Sin duda Cayo Caulker no embelesa con fastuosos resorts o una vida nocturna imparable. Su atracción radica en ser un rústico oasis que se vale de su belleza natural para enamorar hasta al más escéptico.
Cuándo ir. La temperatura media anual es de 24 °C en Belice, y las estaciones se dividen en seca y de lluvias. Se recomienda evitar la temporada de huracanes, de junio a fines de noviembre.
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