La eventual llegada del fenómeno de El Niño, que traería una prolongada y fuerte sequía, afectará la cosecha de primera e incrementará la crisis alimentaria en varias regiones del país, aseguran expertos.
Para hacerle frente a ese inminente escenario, el Comité Técnico Interinstitucional para la Sequía, conformado por diferentes instituciones del Estado, implementarán el plan de seguridad alimentaria.
El plan aborda una serie de intervenciones en función a las amenazas que pueden causar la crisis alimentaria en al menos 40 municipios de los departamentos de Choluteca, Valle, El Paraíso, La Paz, Lempira, Intibucá, Ocotepeque, Francisco Morazán y algunos municipios del departamento de Gracias a Dios.
Para saber
Pronósticos. Con la influencia del fenómeno de El Niño se prevé que el período de canícula, es decir, la disminución de la lluvia, sea más extensa. Las proyecciones indican que las lluvias se reducirán entre un 60% y 80% menos que lo que normalmente llueve entre julio y agosto, de acuerdo con Cenaos.
En esos municipios es donde se tiene el índice de inseguridad alimentaria más alto, es decir, que están en una situación grave, detalló Carlos Ramos, responsable de planificación técnica en la Dirección Nacional de Preparación y Respuesta de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias (Copeco).
La intervención es integral y va enfocada en atender los cuatro pilares de la seguridad alimentaria y nutricional, que son la disponibilidad, el acceso, el consumo y la utilización biológica de los alimentos.
“En el pilar de disponibilidad se va a comenzar la producción de alimentos por parte de la Secretaría de Agricultura y Ganadería a través del Bono Tecnológico y Ganadero, se va a potenciar el uso de las reservas de agua con fines agrícolas. En el acceso se va a dotar a las familias con raciones básicas de alimento o transferencias monetarias; en el pilar de consumo se va a revisar que los diferentes tipos de alimentos estén disponibles en los municipios para que la dieta básica de las familias no se vea afectada. En la utilización biológica de los alimentos se van a hacer los esfuerzos necesarios por parte de la Secretaría de Salud y otras instancias públicas y privadas para hacer un monitoreo efectivo de los niveles de nutrición, de las incidencias de las enfermedades agudas enfatizando a las personas vulnerables”, explicó el ingeniero Ramos.
Más
El próximo lunes las autoridades que conforman el Comité se reunirán para concluir el plan y conocer cuánto se requiere para ejecutarlo.
Con el plan se atenderán a unas 20,000 familias; sin embargo, la cifra de los que padecen problemas de inseguridad alimentaria y nutricional en el país es mayor.
“El último análisis que se hizo de seguridad alimentaria y nutricional en fases refleja que son aproximadamente 2.3 millones de personas que ya sufren de algún nivel de inseguridad alimentaria en el país, o sea, familias que ya no tienen acceso a la cantidad de alimentos óptimos o que tienen que sacrificar alguna de sus tres comidas al día para poder salir adelante en el tema de nutrición. Pero en este caso la intervención va ser más dirigida a familias que ya están en la fase cuatro, que son mucho menos y que si están en una situación más difícil”.
De acuerdo al informe “El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2022”, realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en Honduras entre 2014 y 2016 alrededor de 1.3 millones de personas padecían de inseguridad alimentaría grave; lamentablemente y a pesar de los esfuerzos, la cifra se incrementó a 1.8 millones entre 2019 y 2021.
Respecto a los que padecen de inseguridad alimentaria moderada, el informe destaca que la cifra pasó de 3.8 millones de hondureños a 4.9 millones, por lo que es necesario desarrollar acciones que logren reducir esos número.
