REDACCIÓN. El pan es un alimento básico en la dieta hondureña, se incluye en los tres tiempos de comida y, sobre todo, a “la hora del café” en las tardes.
Y aunque su consumo desmedido puede causar fuertes consecuencias en nuestra salud, es importante recordar que pertenece al grupo de los carbohidratos y es una fuente de energía, por eso no podemos eliminarlo por completo.
Aun así es necesario diferenciar qué tipos de pan podemos consumir y cuáles debemos comer menos.
PAN INTEGRAL
La doctora Iliana Castillo, especialista en nutrición, explica que en este asunto suele haber una confusión, “la gente dice que este tiene menos calorías, que es mucho mejor que el pan normal y, sin embargo, es importante saber y conocer que la única diferencia del pan integral es que tiene más fibra y es un gran aporte al tracto intestinal; pero la carga calórica es la misma que un pan normal”.
REPOSTERÍA
En este punto entran el pan dulce y las variedades que se elaboran con azúcar u otro endulzante.
La repostería se distingue por ser un postre, por su elaboración y presentación final de otros panes, como las semitas, las margaritas, los pasteles, entre muchos otros.
“En cuanto a la repostería, podemos consumir un pan una vez a la semana, y hay que aclarar que no hay alimentos buenos ni malos, realmente lo malo es la cantidad o la frecuencia con la que consumimos algo, pero siempre y cuando controlemos la cantidad de estos, vamos a poderlo consumir una o dos veces por semana; también dependiendo si existe una patología o no”, asegura la experta.
SUSTITUCIÓN
El pan contiene muchos carbohidratos y cuando abusamos al consumirlos el aumento de peso es inevitable.
Asimismo, contiene grasa y azúcares que tienden a almacenarse en el abdomen y, por ende, causar inflamación o una barriga grande.
En el caso de la gente que está acostumbrada al consumo de pan diario, es importante trabajar la sustitución; es decir, comer otros alimentos más saludables, integrales o de avena.
Asimismo, la nutricionista indica que el proceso de comer saludable debe ser gradual y de acuerdo a la fuerza de voluntad y disciplina de cada persona.
Cambios paulatinos
Dra. Iliana Castillo - Nutricionista
“No es obligatorio la eliminación total del pan, pero sí hay algunas patologías en las que se requiere un control, podemos sustituir el pan con algún alimento que sea un poco más saludable; por ejemplo, tomar café con una galleta de avena o una galleta integral”.
CONTROL
Uno de los consejos más importantes que da la nutricionista es no eliminar por completo el consumo de pan, pero; “por ejemplo, las personas con diabetes, los pacientes con problemas de presión arterial y problemas del corazón sí deben controlarlo”.
Cabe destacar que el consumo excesivo del pan en algún momento podría desencadenar estas mismas patologías a las personas sanas o que tienen algún antecedente familiar, por lo que deben cuidarse más y procurar no comer este alimento más de dos veces a la semana.
No obstante, si usted ya está muy acostumbrado a comerlo diario, lo mejor será reducir la cantidad paulatinamente para no generar un impacto o ansiedad en su cuerpo.
A continuación, la doctora Iliana Castillo los puntos más importantes a considerar respecto a este tema.