México. El consumo regular de la sandía ayuda a mantenerse bien hidratado.
“Posee mucha agua y fibra, pero más que propiedades diuréticas, tiene propiedades hidratantes y refrescantes”, indica el nutriólogo Fabián Gámez García, especialista en síndrome metabólico.
La porción de sandía que se recomienda consumir diariamente es el equivalente a una taza y media, de preferencia se sugiere comerla sola y no combinarla con el melón.
Alrededor del 90 por ciento de su contenido es agua, lo que la convierte en un excelente medio natural para eliminar toxinas del cuerpo y limpiar vías urinarias, riñones y vejiga.
Su alto contenido de agua genera una sensación de saciedad al consumirla, lo que resulta ideal para quienes buscan bajar de peso.
Así, cada vez que sientan ansiedad por comer pueden consumir algunos trozos sin exceder la porción indicada. Su deliciosa pulpa es fuente rica de vitamina A, de casi todas las vitaminas del grupo B, vitamina C, potasio y magnesio.
