SAN PEDRO SULA. Si es un runner de corazón o le fascina activarse al aire libre, durante las bajas temperaturas es importante que esté bien equipado para evitar las enfermedades de las vías respiratorias.
Aunque realice un ejercicio intenso, abríguese bien y use cubrebocas. “Es conveniente incluso usar gorro y bufanda”, indica María Yolanda Mares, neumóloga
Explica que cuando se está expuesto al aire frío de manera directa, la vía aérea padece agresión física por la temperatura del aire que se respira.
“Cuando estamos sometidos a ejercicio, tomamos mayor volumen de aire en cantidades frías y con un alto contenido de contaminantes, pues es la época en la que se padece inversión térmica. Hay una alta emisión de contaminantes”, advierte.
De acuerdo con la neumóloga, esto puede originar infecciones respiratorias, además de que las personas que padecen enfermedades como asma u obstrucción de la vía aérea por otras causas, son más susceptibles a presentar crisis.
Y es que, el aire frío induce una respuesta inflamatoria que puede comprometer la función pulmonar, agrega.
En estos casos, precisa, es fundamental que los pacientes tengan un adecuado control médico.
Cuidados. La experta aconseja a quienes realizan ejercicio al aire libre, monitorear la calidad del aire en las páginas oficiales, pues en ésta se indica si ésta es buena o mala. Si no es buena, lo ideal es optar por realizar ejercicio en espacios cerrados. Otra alternativa es modificar los horarios en los que se lleva a cabo la actividad.
“Lo que no debe hacerse es dejar de realizar actividad física, pero quizá la opción es moderar el ejercicio”, comenta. Dice que si la persona tiene infecciones de vías respiratorias, se debe evitar el ejercicio y hacerlo hasta que se controle el cuadro infeccioso.
Mientras las temperaturas estén bajas debe consumir jugos naturales y frutas que contengan vitamina C.
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Básico. Use la ropa adecuada, se puede aprovechar al máximo el ejercicio durante el tiempo frío, incluso al aire libre.
Vístase con ropa en capas. Puede quitarse una apenas comience a sudar, y volver a ponérsela, cuando se vaya enfriando. Evita la ropa de algodón, pues absorbe el sudor y se mantiene húmeda. Protéjase las manos y los pies con guantes y calcetines térmicos o dos pares de calcetines normales.