REDACCIÓN. El alcohol, la marihuana y el cigarrillo electrónico (vape) son las sustancias alucinógenas más comunes entre los jóvenes.
Y aunque el consumo ocasional puede parecer irrelevante o solo por diversión, es importante saber que poco a poco pueden convertirse en adicción y generar graves consecuencias a corto y largo plazo.
Para brindar información verídica, basada en sus experiencias y estudios científicos, LA PRENSA entrevistó a dos expertos en el tema: el psicólogo mexicano Alberto Flores (especialista en adicciones) y Timothy Ryan, docente estadounidense y especialista en prevención, quienes explican cómo prevenir o tratar estos problemas en los jóvenes.
- ROL DE LOS PADRES EN LA PREVENCIÓN -
“Es importante que los padres puedan detectar los signos y síntomas de que su hijo está en riesgo de consumir drogas, así como entender cuál debería ser su rol para poder estar presentes en lo que está pasando con sus hijos”, explica Flores.
En este sentido, los jóvenes suelen mostrar conductas aisladas, violentas, rebeldes o retraídas, por lo tanto es vital que los padres aprendan a acercarse a ellos de una manera cordial, con confianza y no atacarlos o juzgarlos, ya que, por el contrario, pueden agravar el asunto.
Timothy Ryan - Especialista en prevención de adicciones
“Los padres deben conocer los amigos de sus hijos y hablar abiertamente con ellos”.
- CONSUMO DE ALCOHOL -
Por su parte, Ryan manifiesta que “el alcohol es la primera adicción que suelen tener los jóvenes, ya que es una sustancia de bajo costo y no es ilegal, lo que facilita su adquisición”.
De igual forma, reitera que las investigaciones apuntan a que entre más jóvenes comiencen a tomar alcohol, más alto es el riesgo de adicción, la cual puede conducir a lesiones por accidentes, caídas, fracturas y quemaduras.
En peores casos, puede ocurrir violencia sexual, homicidios, suicidios, intoxicaciones, relaciones sexuales sin protección o con múltiples parejas que pueden terminar en embarazos no planeados o enfermedades de transmisión sexual, como el VIH-sida.
- VAPE O CIGARRILLO ELECTRÓNICO -
“Este es un problema importante por que hay una gran cantidad de recursos invertidos para hacer parecer los cigarrillos electrónicos muy atractivos, los hacen de muchos colores, formas y distintos tipos.
Esta actividad es riesgosa porque estos aparatos no están regulados ni son aceptados por ninguna asociación médica que asegure su consumo”, dice Flores.
En la prevención de adicciones es importante entender que, antes de que el cerebro de un adolescente termine de formarse, no es buena idea someterse a los químicos que traen estos dispositivos, que son nicotina, aerosoles, aromatizantes, saborizantes, entre otros, ya que todo esto al ser calentado produce una serie de consecuencias en la salud.
Alberto Flores - Psicólogo especialista en adicciones
“El vape es una tendencia mundial que terminará siendo un problema de salud pública”.
“La diferencia de estos con los cigarrillos convencionales es que tienen mayor cantidad de nicotina, por lo tanto el riesgo número uno es que el joven lo consuma de manera experimental, sin tener la información necesaria”, dice.
“Una vez que lo usa, el ambiente suele reforzar esta actividad (presión social), y el tercero es que le guste y genere adicción”, explica el psicólogo.
- EFECTOS ADVERSOS -
El vape suele provocar enfermedades respiratorias, ya que ataca directamente el árbol bronquial y desencadenar enfermedades como asma, epoc, retraso en el desarrollo intrauterino o trastornos en la coagulación sanguínea, así como provocar alteraciones cerebrales.
