Roatán se mueve entre gigantescos cruceros, turismo de aventura y hermosas mujeres
La temporada de cruceros 2024 cerró con 1,700,000 turistas en Roatán, cifra que se espera superar este año. Un día típico en la isla incluye cruceros, playas, gastronomía y vibrante vida nocturna
- 15 de abril de 2025 a las 00:00 -
Hermosas mujeres adornan las playas y todos los sitios turísticos que tiene la isla de Roatán en el Caribe hondureño. En la isla están las mejores playas del país, con aguas cristalinas y arena blanca.
Un día típico en Roatán incluye admirar los imponentes cruceros más grandes del mundo atracados en los dos pintorescos muelles de la isla, que cuenta con aproximadamente 200 restaurantes y 1,042 hoteles.
Diversas actividades de recreación se pueden practicar en el departamento insular. Por el aeropuerto de Roatán transitan diariamente unos 1,200 pasajeros, los fines de semana se duplican.
Un vibrante turismo internacional envuelve la isla, donde la cultura inglesa, aún viva, te hace sentir como si estuvieras en otro país.
Los diversos atractivos turísticos de Roatán y sus complejos hoteleros se mantienen repletos de visitantes. La capacidad hotelera de la isla está reservada en 80% y se espera que se llene esta Semana Santa.
El turista que llega a Roatán encuentra lo que busca, paz, gente servicial y turismo de aventura.
Los yates que parten de La Ceiba están repletos de viajeros ansiosos por disfrutar días llenos de diversión en Islas de la Bahía.
En el puerto de Coxen Hole llegan casi a diario dos cruceros, y en algunos días hasta cuatro o cinco embarcaciones desembarcan miles de turistas en la paradisíaca isla.
Los imponentes cruceros más grandes del mundo atracan por un día en Roatán, donde los turistas desembarcan para disfrutar de los variados y encantadores atractivos turísticos.
Turistas de todo el mundo se enamoran de Roatán, capturando momentos inolvidables en fotografías para preservar sus recuerdos de la isla paradisíaca.
Disfrutar de un refrescante chapuzón en las cristalinas aguas del mar Caribe es prácticamente una experiencia obligatoria para los turistas que visitan la isla.