Trump avergüenza a equipo del Mundial de Clubes: bombardear Irán y su opinión de las mujeres
Los futbolistas se mostraron visiblemente incómodos durante el encuentro, en el que Trump habló de las tensiones políticas con Irán y también de cuestiones de género.
- 19 de junio de 2025 a las 09:25 -

Donald Trump, presidente de Estados Unidos, protagonizó un momento insólito y polémico en el Mundial de Clubes tras recibir a uno de los equipos de fútbol en la Casa Blanca.

Trump recibió la visita de la Juventus de Turín durante el Mundial de Clubes 2025 y los jugadores vivieron momentos incómodos por algunas preguntas del presidente estadounidense.

El líder estadounidense recibió una camiseta juventina con el número 47, su puesto en la lista de presidentes del país.

La Juventus de Turín se encontró con Donald Trump en la Casa Blanca antes de su debut en el Mundial de Clubes, en lo que pareció un encuentro burocrático sin mayor importancia que terminó con el presidente hablando de transexuales en el deporte y el conflicto Irán-Israel, en uno de los momentos más virales del novedoso torneo.

Pocas horas antes de que la 'Juve' goleara al Al-Ain (5-0) en Washington D.C., una pequeña delegación formada por 6 jugadores, el propietario estadounidense Jhon Elkann y algunos directivos, acudió junto al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, a un encuentro con Donald Trump.

Trum hizo un hueco en su apretada agenda y juntó una rueda de prensa ante los medios de comunicación con el encuentro, generando dos momentos incómodos para los futbolistas de la Juventus.

Especialmente para los dos estadounidenses, Timothy Weah y Weston McKennie, a los que Trump interpeló directamente durante un momento para preguntar si aceptarían jugadores transexuales en su equipo.

En un momento del discurso, Trump critica la presencia de personas transgénero en el mundo del deporte. "¿Una mujer podría formar parte de vuestro equipo?", preguntó Donald a los jugadores de la Juve.

El silencio incómodo de ambos obligó al director general del club italiano, el francés Damien Comolli, a intervenir: "Tenemos un equipo femenino fantástico".

"Pero deberían jugar con mujeres. Está siendo muy diplomático", añade Trump, ante las miradas de incredulidad de los jugadores de la Vecchia Signora.

No fue la única imagen que dejó el curioso encuentro, pues Trump abordó la guerra entre Irán e Israel y dijo que no había tomado una decisión sobre si Estados Unidos atacará a Irán. Todo con los jugadores de la 'Juve' de fondo, serios ante la situación.

Donald Trump olvidó que estaba atendiendo la visita de un equipo de fútbol y siguió con su discurso, hablando sin pelos en la lengua del conflicto entre Israel e Irán, y con su habitual incontinencia oral.

"¿Atacar a Irán? Tengo una idea, pero las cosas cambian muy rápido. ¿Un cambio de régimen en Teherán? “¿Por qué no? Podría pasar. Ya veremos”, declaró Trump, siempre con la plantilla de la Juventus y el presidente de la FIFA detrás, como si fueran del Partido Republicano en un acto de campaña.

Donald Trump recibió una respuesta desde el club italiano que no esperaba. Y es que lo que hizo el presidente de Estados Unidos sorprendió a todos.

Después de golear 5-0 a Al Ain en Washington en el Mundial de Clubes, Timothy Weah, delantero de la Juventus, definió "un poco raro" el encuentro mantenido horas antes en la Casa Blanca con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el que se habló de las tensiones políticas con Irán, inmigración y también de cuestiones de género.

Tras el 5-0 del Audi Field, Weah aseguró a última hora del miércoles, en declaraciones recogidas por el 'NY Times', que todo pasó por sorpresa para la plantilla del Juventus: "Nos dijeron que teníamos que ir y no tuve otra opción. (...) Fue un poco raro cuando empezó a hablar de política con Irán y todo. Yo solo quiero jugar al fútbol".

La Juventus envió a la Casa Blanca a una delegación formada por el dueño John Elkann, el consejero delegado Maurizio Scanavino, el director general Damien Comolli, el directivo Giorgio Chiellini y los futbolistas Weston McKennie, Weah, Manuel Locatelli, Federico Gatti, Dusan Vlahovic y Teun Koopmeiners, además del técnico Igor Tudor.

Los únicos estadounidenses presentes fueron Weston McKennie y Weah. Entre los demás, había jugadores de Serbia, Holanda, Italia y Tudor, de nacionalidad croata.