San Pedro Sula, Honduras
La actividad económica del país tuvo un alza de 3.7% a noviembre de 2018, según el último informe del Índice de Actividad Económica del Banco Central de Honduras.
Las actividades que más incidieron en el crecimiento de la producción nacional fueron la intermediación financiera, seguros y fondos de pensiones, la industria manufacturera y el comercio.
Según el BCH, la intermediación financiera, seguros y
fondos de pensiones registró un incremento de 6.6% al percibir mayores ingresos en concepto de intereses por préstamos, en especial los prendarios, fiduciarios e hipotecarios otorgados a hogares y empresas.
La industria manufacturera mostró una variación de 3.7%, donde el renglón que más aportó fue el de alimentos, bebidas y tabaco que presentó un crecimiento de 3.9%.
Otra actividad económica que tuvo un importante desarrollo fue la fabricación de textiles y productos de vestir con una variación de 4%, donde la mayoría de su producción fue exportada a El Salvador, Nicaragua y Guatemala.
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El comercio también tuvo un desempeño positivo, ya que creció 3.7% explicado por la mayor venta de productos alimenticios, equipo de transporte, bebidas, productos derivados de petróleo y aparatos de uso doméstico.
La actividad de hoteles y restaurantes aumentó 4.8% por ingresos de alojamiento y el suministro de comidas y bebidas, gracias al crecimiento del turismo.
Actividades de los servicios de correo y telecomunicaciones aumentaron 3.5%.
La agricultura, ganadería y silvicultura crecieron 2.4%.
En este sector, la pesca tuvo una caída del 5%, producto de la caída en el cultivo de camarón, donde se redujeron las exportaciones principalmente por las lluvias de octubre.
El transporte y almacenamiento se incrementó en 4.6%, producto de los servicios de transporte de carga por vía terrestre y marítima debido a la movilización de bienes nacionales e importados.
La tasa de variación de la construcción privada se ubicó en 4.7%, explicada por la edificación de viviendas sociales y de clase media en el Distrito Central, Santa Rosa de Copán y La Ceiba.
La generación de energía con fuentes hídrica, solar, eólica, biomasa y geotérmica motivó a que la actividad de electricidad y distribución de agua creciera 5.5%.
