San Pedro Sula, Honduras.
Su familia ha sido bastión importante para Elexa. Vickie, su madre y de origen colombiano, también ha hecho sacrificios para ver a su hija realizarse en el rol de futbolista.
Elexa Bahr, la goleadora de la Selección Femenina Sub-20 de Honduras es una chica sencilla, que trata de acostumbrarse a la popularidad que ha ganado desde que debutó con la Bicolor en el Premundial rumbo al Mundial de Nueva Guinea 2016.
Los seguidores en sus cuentas de Facebook e Instragram se han incrementado rápidamente. “No estoy acostumbrada a eso”, dice mientras sonríe y agrega “es una bendición”.
Cuando hizo las maletas para viajar a Honduras, Elexa quizá se quedó corta al imaginar hasta que instancias podría llegar con este grupo. “Siempre soñé con estar en la Selección Nacional”, recuerda. Ahora, instalada junto con sus compañeras en la semifinales del torneo de Concacaf se atreve a seguir soñando. “Aspiro a clasificar al Mundial”, pronuncia con mucha seguridad.
VIDEO: ASÍ BAILA PUNTA ELEXA BAHR
Admiradora de la brasileña Marta, del argentino Lionel Messi y del Barcelona, esta hermosa joven de 17 años está entregada a lo que por el momento es su principal pasatiempo. “El fútbol significa todo para mí”, admite.
El deporte es una herencia de su padre Alex Bahr, un exjugador hondureño del Independiente y Petrotela. De hecho, no es la única. También sus hermanos están ligados al fútbol. La pequeña Victoria con tan solo 11 años ya muestra sus dotes como centrocampista.
 Elexa Bahr registra tres goles en los tres partidos que ha disputado en el
Premundial Femenino Sub-20 de la Concacaf.
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Todavía no se atreve a entonar el Himno Nacional y es que si bien sabe algunas líneas, su español no es tan fluido como ella quisiera. A pesar de su poco manejo de este idioma (aunque promete mejorarlo), su adaptación al grupo fue casi inmediata. Eso sí, la concentración no ha resultado cosa fácil. “No tenemos celulares ni podemos comunicarnos con nuestra familia, pero hay que hacer sacrificios”.
El jugar con la Selección hondureña fue cosa del destino (pudo hacerlo con Colombia), algo a lo que esta talentosa no piensa renunciar más allá de sus estudios. “Aunque no me dedique a esto, jugaría siempre para la Selección de Honduras”, indica.
Elexa acepta ser la sensación del equipo catracho, dirigido por Miguel Escalante, ella tiene claro que “ser una estrella es una gran posibilidad, pero quiero que todo el equipo destaque”.
La clasificación a semifinales tuvo un ingrediente especial para la número 10 de Honduras: el fallecimiento de su abuelo. “Sé que todo sucede por una razón, por un propósito más grande. Ahora estás en el cielo y sé que vas a verme desde arriba. Gracias por todos los recuerdos y el amor”, escribió luego del partido contra Canadá en una de sus redes sociales. “Ha sido un momento difícil para mi familia”, nos dice después.
Su mente tampoco se separa de la idea de que en un par de años esté jugando con la Universidad de Carolina del Sur, una de las más prestigiosas en Estados Unidos. Allí piensa en graduarse de Negocios y alternar la profesión con el fútbol. Es más, no descarta la posibilidad de enrolarse en algún equipo de la liga femenina estadounidense.
