La inflación de Estados Unidos se desaceleró en noviembre pero con una ralentización del consumo justo cuando empezaba la temporada de compras de fin de año lo que podría preludiar una recesión en 2023.
Las señales y los reiterados avisos sobre una recesión económica mundial el próximo año debieran ser más que suficientes para un compromiso colectivo real, veraz y firme para que los posteriores lamentos no enreden más el laberinto de la economía nacional ...