Se maneja la versión de que se habría quitado la vida, pero las autoridades del hospital manifiestan que murió en la condición de una supuesta sobredosificación de un relajante.
Los policías Jairo Posadas y Juan Murillo, ambos de 37 años, y Jonathan Ramos, de 27, serán llevados a Salamá en Olancho, Nacaome en Valle, y a La Venta en Francisco Morazán.