Se trata de Wilmer Segovia, de la reconocida célula Shulton, quien ha sido declarado culpable de haber cometido 33 homicidios, 9 proposiciones para cometer asesinatos y varias extorsiones.
Al momento de la detección se le decomisó un arma de fuego tipo UZI con su respectivo cargador conteniendo ocho proyectiles sin percutir y dos libretas contables en las cuales se encontraron datos del cobro de extorsión y la venta de droga, así lo informó la Policía.