Tránsito sigue multando a hondureños por licencia vencida pese a no tener material

San Pedro Sula, Honduras.

Pese a que la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (Dnvt) comunicó públicamente que no sancionaría a conductores que circulen con licencia de conducir vencida debido a material agotado para emitir los permisos, una base de datos y un oficio constatan que desde el 16 de febrero hasta el 9 de mayo de este año contabilizaron en sus archivos 174 infracciones por licencia vencida, tipificada como una falta menos grave en la Ley de Tránsito.

La información está contenida en una hoja de cálculo y el oficio con código DGPN NO.3216-2023, proporcionados por la misma entidad a través de una solicitud del Instituto de Acceso a Información Pública (IAIP) a LA PRENSA Premium.

Al multiplicar la cantidad de eventos reportados de licencia vencida (174) por 400 lempiras, que es el costo de sanción de cada una, se obtuvo una cifra total de 69,600 lempiras, dinero que fue pagado sin fundamento en los últimos tres meses por conductores a las arcas estatales en medio de una crisis institucional sin precedentes.

Autoridades también interceptaron a 1,489 personas que se transportaban sin licencia de conducir y a 159 con licencia suspendida. Esto ha desencadenado una serie de cuestionamientos entre distintos sectores, que aducen que les es imposible transportarse con este documento de identificación vehicular si la misma institución tiene las puertas cerradas para concederlo.

Uno de los afectados fue Josué Valenzuela, residente en el barrio Las Acacias de San Pedro Sula y trabajador de una maquila, quien expresó que se vio obligado a cancelar una multa de 600 lempiras por circular en la ciudad con su vehículo turismo sin haber pasado las pruebas de manejo.

“No sé cómo es que quieren que uno ande legal si tienen todo parado. Necesito el carro por mi tipo de trabajo y no lo puedo tener en desuso en la casa”, discrepó molesto el ciudadano.

A la fecha, Vialidad y Transporte se ha limitado a informar e insistir que continúan en proceso de licitación para la compra de material, por lo que no disponen para la emisión del documento por primera vez. De esta forma, quienes conducen por primera vez no están autorizados a circular.

Además, la renovación del documento, la recepción de solicitud para el permiso y la realización de pruebas teórico-prácticas están paralizadas. Esto significa que al conducir sin licencia, considerado esto como una falta grave en la Ley de Tránsito, los usuarios son sancionados con 600 lempiras, por lo que entre mediados de enero a mayo, las autoridades cobraron 893,400 lempiras ante dicha falta.

Más allá de las multas por manejar sin permiso o con licencia vencida, Vialidad y Transporte indicó que en este período de tiempo se cometieron en el país un total de 57,047 infracciones, dejando 55,5 millones de lempiras. Se describió que los hombres fueron partícipes de la mayoría de faltas: 51,326 faltas versus de 5,699 por mujeres; sin embargo, al cruzar este reporte con una base de datos desglosada de la institución no calzan la cantidad de hechos y de dinero.

Mientras el reporte general da cuenta de 57,047 infracciones, la otra base de datos apenas contabiliza 37,080 infracciones, entre graves, menos graves y leves (castigadas con 300 lempiras). Además, la recaudación era equivalente de 17.8 millones de lempiras, muy lejos de los 55.5 millones de lempiras.

A este bloque se suman 1,871 faltas (por ebriedad y permiso decomisado por decreto) enmarcadas en el artículo 100/2000 que se sancionan de manera independiente y que pueden ser de uno a tres salarios mínimos. Al sumar estas a la cantidad de infracciones anteriores, el número de eventos ascendió a 38,951, dato que tampoco coincide con lo descrito por la Policía, pero considerando el valor promedio de salario mínimo en las principales ciudades, que oscila los 15,000 lempiras, versus la cantidad de infracciones suscitadas, esto hace suponer que solo por el marco de estas dos sanciones se recaudaron más de 20 millones de lempiras, que es así como se estima que de 17,850,000 se pasó a recibir 55.6 millones de lempiras, que corresponde al total reportado.

Lincoln Pacheco, comisionado y director nacional de Tránsito, en entrevista con LA PRENSA Premium reaccionó con extrañeza por el dato, pero aseguró que quienes han sido sancionados por licencia vencida tienen derecho a presentar las impugnaciones y hacer la revisión de cada caso. “Somos una institución jerarquizada y nuestros funcionarios ya saben que no se les debe sancionar por eso, tal y como se indicó en el comunicado”, recordó.

El jefe policial afirmó que la etapa de licitación está avanzada, pero que no se atreve a mencionar una fecha de retorno a labores. Pacheco también dijo que la razón detrás de demasiadas infracciones desde febrero es el incremento de la poca cultura vial, por lo que advirtió que seguirán aplicando la ley.

Mientras tanto, ante la cuantiosa suma de dinero recaudada por infracciones, no se descarta que haya existido reincidencias en las faltas 100/2000 en el período analizado, donde las multas están asociadas a salarios mínimos, pero la cantidad varía según el nivel de gravedad de la falta, ciudad donde pertenece el conductor y sector en el que trabaja.

Desde Tránsito se asevera que el dinero recaudado nunca termina en sus manos, puesto que se destina al Estado como tal. Una fuente con solicitud de anonimato de la misma institución incluso comentó que ante los engorrosos protocolos existentes tienen limitaciones hasta para cambiar de impresora o comprar una patrulla.

Análisis hechos por LA PRENSA Premium mostraron que las principales faltas en que incurrieron hondureños en los últimos tres meses fueron no usar el cinturón de seguridad (3,751), usar aparatos de la Policía (3,036); es decir, adición o uso indebido de dispositivos luminosos reservados para vehículos de emergencia; exceso de velocidad (2,642) y conducir más de dos personas en motocicleta (2,255).

Para el economista Jorge Interiano, sancionar a conductores irresponsables es la medida correcta, aunque se pregunta qué hace la Policía con tantos ingresos de dinero.

“Deberían no destinar los fondos a otras cosas, sino reinvertirlos en el mismo sector, por ejemplo, en capacitaciones viales o campañas publicitarias. Estos millones recaudados son dinero considerable y se pueden hacer muchas cosas”, expuso. Interiano sostuvo que el dinero que paga el infractor es algo que no está dentro de su presupuesto y lo afecta financieramente.

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Como parte del sector transporte, el dirigente Edgardo Menéndez, manifestó su respaldo a la Policía en cuanto a imponer orden vehicular; sin embargo, discrepó en la metodología utilizada.

“Aquí solo están pendientes si uno va hablando por teléfono o no lleva el cinturón puesto, estamos de acuerdo que pongan orden, pero que sea parejo para todas las modalidades y no solo se encarguen de multar”, señaló el empresario del transporte de carga.

Menéndez declaró que muchos de sus conductores están teniendo problemas para viajar fuera del país debido a la no renovación de licencias. “Tengo licencia desde los años 70 y nunca en mi vida había mirado una crisis en Tránsito como esta”, lamentó.

De momento, la población solo puede acudir a las instalaciones de Tránsito para realizar el pago de esquelas, accidentes, constancias y otros trámites.