Solo 15 ambulancias operan en San Pedro Sula y Tegucigalpa

San Pedro Sula

Unos 200 millones de lempiras se habrían pagado por más de 100 ambulancias equipadas que fueron adquiridas por el gobierno anterior y ahora no las encuentran.

Luis Sosa, titular de la Dirección de Bienes del Estado, confirmó que serían unos 200 millones de lempiras los que se pagaron por las ambulancias.

“Los procesos de compra están, se pagaron, pero cuando las fuimos a buscar no había nada en el 911”, explicó el funcionario. Destacó que poco a poco han ido encontrando compras que se efectuaron, pero que el producto no aparece.

“En el papel si está pagado, así hay muchas compras, ese dinero de la tasa de seguridad y sus compras por estar en secretividad se prestó para una gran cantidad de sinvergüenzadas”, aseguró.

Una investigación de LA PRENSA Premium detalla la compra de 163 ambulancias mediante contratación directa con fondos de la tasa de seguridad.

Los documentos revisados son de desembolsos realizados entre mayo de 2017 y septiembre 2018, después de que el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad (CNDS) aprobara la millonaria compra.

Los registros de transferencias en el portal de transparencia indican que fueron 70.7 millones de lempiras desembolsados para la adquisición de ambulancias del Sistema Nacional de Emergencias (SNE).

Según la resolución del CNDS, el proyecto de compra de las ambulancias establecía que se haría en dos fases: una primera adquisición de 40 ambulancias valorada en 2,100,000 dólares (equivalentes a aproximadamente 49 millones de lempiras a cambio de esa fecha).

Otros 123 vehículos serían adquiridos en una segunda fase para llegar a un total de 163.

De las más de 100 ambulancias que supuestamente fueron compradas, solo unas 15 están en funcionamiento en San Pedro Sula y Tegucigalpa.

Un funcionario de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), que pidió no ser identificado, dijo que en la primera compra se adquirieron 40 ambulancias, “todas para Copeco, nunca pertenecieron ni fueron administradas por el 911”.

Agregó que de esas 40 ambulancias compradas, 14 fueron asignadas a San Pedro Sula y el resto se dividió en otros puntos del país.

Manifestó que luego se hicieron otras compras de ambulancias. “Lo que debe buscar la junta interventora son las ambulancias que se les dotaron a los hospitales, porque Copeco jamás compró 200 ambulancias como están diciendo”, afirmó.

“También hubo algunas que se fueron a pérdidas totales por accidentes, otras que están en mal estado, y eso lo tienen que verificar con Copeco no con el 911”, finalizó.

LA PRENSA Premium realizó un recorrido por la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), donde constató que hay varias ambulancias en mal estado en los planteles de la institución.

Una fuente de la comisión interventora del Sistema de Emergencia del 911, creada por la presidenta Xiomara Castro desde febrero pasado y cuya gestión tendrá una duración de un año prorrogable, reveló que en la capital apenas funcionan tres ambulancias.

Además de las tres ambulancias en mención, en Tegucigalpa solo están operando cuatro vehículos de emergencia de la Cruz Roja Hondureña, así como las que pone a disposición el Cuerpo de Bomberos de Honduras.

De hecho, en las últimas semanas el SNE recibió una denuncia en su contra por supuestamente no atender a tiempo a un ciudadano que reportó una emergencia en la capital.

Ante ello, la institución desmintió la situación, que afirma, coordinó con otros entes de socorro y aclaró al falta de unidades por el presunto saqueo.

En San Pedro Sula están en funcionamiento ocho ambulancias con un motorista y un paramédico que operan por turno, otras están en el predio de la institución por mal estado o ya fueron declaradas en pérdida total debido a la destrucción.

Frank Antúnez, subcomisionado de Copeco, indicó que están trabajando con normalidad y en coordinación con el 911, que envía los llamados para las atenciones médicas.

Agregó que cuando recibió el cargo, solo había tres ambulancias funcionando y ahora tienen ocho gracias a convenios que han logrado con la empresa privada de la zona norte y con fondos de la secretaría.

El 8 de agosto, la Unidad Fiscal Especializada Contra Redes de Corrupción (Uferco) decomisó documentación en el Sistema Nacional de Emergencias 911 como parte de investigaciones de fondos provenientes de la Tasa de Seguridad.

La PRENSA Premium le consultó al portavoz del Ministerio Público, Yuri Mora, si había alguna investigación por la compra de ambulancias indicando que cree que Uferco sí tiene esa línea de investigación, pero no poseía detalles sobre las mismas.

Una fuente oficial del 911 confirmó que el Ministerio Público tiene 100 facturas de unas 100 ambulancias que fueron compradas.

Indicó la fuente que por algún motivo no existen documentos de cómo hicieron el traslado de bienes ni dónde están.

Las actual junta interventora del 911 no ha encontrado registros de las compras de las ambulancias y creen que hay personal del interior del país que tienen algunos de los vehículos que fueron comprados para adaptarlos como ambulancias.

Además se han enfrentado a que algunas de las compras no fueron reales y solo constan en papel.

“Solo tenemos documentos de 2019 para abajo”, confirmó la fuente. De los últimos años de la administración anterior del 911, según las investigaciones, no hay documentos.

Según documentos de las compras de las ambulancias, los vehículos fueron entregados totalmente acondicionados para las atenciones de urgencia.

Las ambulancias fueron adquiridas hasta con una bala o tanque de oxígeno instalada para evitar cualquier tipo de accidente o sonidos incómodos.

Además, incluían una camilla principal y otra para inmovilización espinal, silla de rueda portátil, monitor de signos vitales, frecuencia cardiaca y presión así como tensiómetro de adulto y niño.

También contaban con fonendoscopios, tijeras, termómetros, perilla de succión, mantas térmicas, así como otros instrumentos para la atención de emergencia.

De esos equipos de las ambulancias que están en mal estado o que fueron declaradas en pérdidas total tampoco se ha detallado si fueron sacados de los vehículos o también están en mal estado.