Recortaron fondos para bordos del valle de Sula en 73%
El presupuesto para bordos se redujo de L104 millones a L28 millones en 2024. Parte de las obras ya se dañaron, mientras en otras zonas siguen a la espera de proyectos...
Foto: Moisés Valenzuela.
El boquete en el bordo del canal de Amapa inundó a cientos de familias.
Por:
EL PROGRESO
En más de 70 millones de lempiras fue recortado el presupuesto de la Secretaria de Infraestructura y Transporte (SIT) para la construcción y reparación de bordos en el valle de Sula en 2024, según reportes de la Secretaría de Finanzas.
Para 2024 se aprobó un presupuesto inicial de 104 millones de lempiras para el rubro “Construcción de bordos de contención en el valle de Sula” (incluyendo supervisión), constató la Unidad de Datos de LA PRENSA Premium.
No obstante, el reporte de ejecución presupuestaria de noviembre de 2024 muestra que el presupuesto vigente fue reducido drásticamente a solo 28.5 millones de lempiras, lo que significa un recorte de L75.6 millones (un 72.6% menos).
De este presupuesto ajustado, ya se habían ejecutado 28.3 millones de lempiras para noviembre, equivalente al 99.5% de los fondos disponibles.
Estos datos constan en los reportes de Finanzas y en el desglose de liquidación presupuestaria de la SIT, específicamente en el programa “Obras para el control de inundaciones en el valle de Sula”, administrado por la Unidad Administrativa del Valle de Sula.
Obras
LA PRENSA Premium también detectó que la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT) notificó la apertura de ocho procesos de licitación para la reparación de tramos, bordos y filtraciones en diferentes zonas del valle de Sula durante 2024, además de adjudicar tres proyectos mediante contratación directa, sumando un total de 11 obras planificadas.
Sin embargo, una revisión exhaustiva del portal de transparencia de la SIT revela que únicamente se encuentran disponibles los contratos de adjudicación de seis proyectos: tres por licitación y tres por contratación directa. Estas seis obras, ejecutadas entre mayo y junio, representan una inversión cercana a los 36 millones de lempiras. Sobre los cinco procesos restantes, no hay información pública que aclare si fueron declarados desiertos o si simplemente no se han subido los documentos al portal.
Se desconoce por qué el monto total que consta en los contratos (L36 millones) difiere del reportado en los registros de Finanzas (L28 millones).
Reconstrucción
En los excampos bananeros de El Progreso, Yoro, se realizó la construcción y reparación de bordos de protección, así como la instalación de compuestas, en los últimos seis meses de 2024.
Sin embargo, un tramo de bordo a un extremo del canal de Amapa cedió, lo que provocó que las comunidades de San Isidro, La Duarte, Las Chumbas, una parte de Naranjo Chino, entre otras, resultaran inundadas por varios días luego de la tormenta Sara.
José Mariano Chirinos, vocal del patronato de Amapa, explicó que en la zona identificada como Tamarindo el bordo que había sido construido hace más de un año quedó completamente destruido.
Indicó que ese bordo había sido reforzado por los productores de palma que sacaban sus productos por ese lugar, pero ya no pueden hacerlo.
Otros bordos nuevos, levantados a finales de 2024, resultaron dañados por las aguas, dejando enormes grietas.
“La preocupación de la comunidad es que si no nos incluyen en las obras para este año a final siempre estarán huyendo de las inundaciones y con pérdidas como les ocurre cada año”, advirtió. Durante años, los pobladores de Amapa han solicitado la construcción de un puente sobre el canal de alivio, pues también con las crecidas del río Ulúa quedan incomunicados.
Otro de los graves problemas del sector es que aún no les construyen un bordo y una compuerta en el canal 16, que también afecta a la comunidad de Monterrey.
Este proyecto lo esperan desde el paso de los huracanes Eta y Iota.
En el recorrido también los vecinos mostraron cómo el bordo El Ceibón, denominado así por un árbol que está en las cercanías, fue casi arrasado por las aguas, porque, según ellos, los constructores no lo reforzaron y el agua golpeaba con fuerza.
A lo largo del margen izquierdo del río Ulúa, siguiendo el recorrido por los excampos bananeros, se observa el mal estado de la calle que conduce hasta Urraco, con enormes agujeros y charcos que impiden el paso de los vehículos cargados de fruta de palma.
En la zona de Urraco los habitantes también tienen exigencias, como levantar un bordo de un canal de alivio.
Durante la tormenta Sara, los vecinos lanzaron volquetadas de tierra para que el agua no rompiera y los inundara.
En tanto, el bordo de El Solutepe, cuya reparación arrancó en 2024 a un costo de 19.1 millones de lempiras, sigue inconcluso, pues faltan las escolleras en la margen derecha del río Ulúa.
Pendiente
Jorge Thompson, dirigente de patronatos de la zona de los excampos, expresó que siguen sufriendo por los daños, pues en muchas zonas la fruta de palma no se puede sacar porque aún hay zonas inundadas. Tampoco pueden empezar a sembrar frijoles ni maíz. Indicó que se unirán todos los patronatos de las comunidades bajo vulnerabilidad para levantar su voz, exigiendo desde principio de año que prioricen estas obras en el valle de Sula.
Se requiere la reparación de 400 metros de bordo en el Boquerón, un canal de alivio del puente Negro. También hay que tapar agujeros en los bordos en la colonia Las Flores, donde han medido seis veces, pero no hay presupuesto para la inversión, enlistó Thompson.
Agregó que frente a las cañeras de Río Chiquito también tienen problemas, pues el agua saltó el bordo y dejó incomunicados a todos los pobladores. Otra necesidad es la construcción de compuertas en Monterrey, Pajuiles, así como en Urraco.
Repuesta
Sobre el tema, LA PRENSA Premium contactó al secretario de la SIT, Octavio Pineda. En la llamada telefónica, Pineda dijo que enviaría un listado de las zonas afectadas en el valle de Sula por mensajes de WhatsApp, porque en ese instante no tenía la información a mano. LA PRENSA Premium envió las consultas, pero hasta la hora de cierre no hubo respuesta. Igualmente, ayer se le consultó a Pineda sobre la reducción del presupuesto para la construcción de bordos, pero tampoco hubo reacción.
Sin medicamentos en centro de salud y posta abandonada
El Progreso. Una enfermera llega a cumplir su horario de trabajo y prestar algunas atenciones en el centro de salud de la comunidad de Amapa, pero en el lugar no hay medicamentos.Así han quedado desde la tormenta tropical Sara, pues el poblado quedó incomunicado por las crecidas del río Ulúa.
Vecinos de la comunidad indicaron que desde noviembre del año pasado no volvieron a suplirlos de medicamentos. Suponen que por temor a las inundaciones, pero ya pasaron las alertas máximas y aún no les llevan las medicinas básicas. Otro establecimiento abandonado es la posta policial.
A diferencia del centro de salud, esta unidad no tiene elementos policiales desde los huracanes de Eta e Iota. Adentro aún quedan las camas de metal con lodo y las puertas permanecen abiertas. Pese a que ocurren asaltos y hay hombres armados por las invasiones a las plantaciones de palma, no envían policías.